Una entrada sobre botas es realmente complicado. Es un complemento muy versátil y que es necesario adaptar a las condiciones físicas y estilo de cada una. Así que generalizar puede resultar de escasa ayuda. Sin embargo, Arabesque me plantea un problema concreto al que creo que podremos darle solución.
Arabesque es una chica alta pero no demasiado contenta con su gemelo, que considera demasiado grueso. Quiere llevar botas pero le resulta complicado porque no encuentra aquéllas con las que sentirse cómoda. Para problemas similares a los que tiene Arabesque, de gemelo ancho, habrá dos opciones básicas:
- Las más adecuadas y más sencillas serán las de piel blanda que quedan arrugadas en la pierna. Al no quedar pegadas al músculo, lo disimulan. Tanto de tacón como planas. Tanto de ante como de piel. La clave es que el tejido no se pegue al gemelo.
- Otra opción son las botas que no llegan ni a media caña. Ese alto intermedio, parecido a las botas moteras, que queda justo en donde empieza el gemelo. Al cortar en ese punto, visualmente no recarga, no da volumen.
Seguid tan guapas.
No se te ocurra: botas de tacón finito, punta larga y de caña muy ceñida. Si apretamos al problema, se le verá más aún.
Over-the-knee. Completamente vetadas.
Panties muy gruesos. Evita las medias de lana o de algodón muy grueso porque si recubres algo de un tejido muy gordo pues parecerá más grande. Tampoco los estampados exagerados.
Leggings de lentejuelas. Lo mismo que lo anterior. Si no quieres que algo se vea, no le pongas luces para que todo el mundo mire hacia él.
Acomplejarte. Tener un gemelo grueso no es nada malo. Es estupendo tener unas piernas torneadas a las que sacar partido con una sandalia de tacón. Simplemente, es saber cómo resaltar la parte bonita. Existen muy pocos cuerpos perfectos. La mayor parte de ellos simplemente lo parecen. Y a ello tenemos que aspirar.
Lo encontrarás en: ambos son deAdolfo Domínguez; el conjunto de la izquierda es de la e-Collection y el de la derecha, de la línea U.