Hola a todos.
Después de algunas entradas mías, hoy le toca el turno a una de las colaboradoras del blog, “Luna de letras”.
Y el título…
¿Cómo me siento?
¿Cómo me siento? Es una pregunta que realizamos a lo mas profundo de nuestro ser en un mundo que te agobia de exigencias, en complejidades, muchas veces sin dejarte ser la persona que en realidad eres, en un mundo en el cual no ven tus virtudes o lo tanto que has mejorado, en uno tan cruel como para recordarte todo lo malo que ven en ti.
A veces pensamos que los animales son solo eso animales, pero no, los observo y veo tanta libertad en ellos, el cómo las aves vuelan por el cielo cerca de las nubes sintiendo el viento sobre ellas, libres de preocupaciones, de exigencias, siendo ellas mismas, si Dios me diera la oportunidad de nacer de nuevo y me preguntara, quisiera ser eso, un ave de hermosas plumas, una que volara por el firmamento con tanta libertad, sin preocuparse de qué comer o qué vestir, quisiera sentir esa sensación de estar entre la nubes , de sentir un fuerte viento en mi rostro. No soy la perfección hecha mujer, y duele tratar de ser la chica, la hija, la novia perfecta, la que todos admiran, la que todo lo logra, porque nada logro, porque al verme en el espejo a veces veo los errores que todos gritan, porque cuesta verme como DIOS dice que me ve, cuando todos dicen lo contrario, a tal punto que me veo como ellos me ven.
Correr, gritar, es lo que anhelo, abandonarlo todo, salir de este encierro en que me encuentro, salir de mi misma, sin mirar atrás, correr con todas mis fuerzas hasta quedar sin respiración, con tanta intensidad hasta sentir salir mi corazón, con tanta rapidez hasta hacerme dueña del tiempo y desvanecerme en él, desearía encontrarte, encontrar lo que tanto mi alma desea para aquietarla, no seré escritora, ni escribiré grandes líneas de forma correcta, pero son líneas que expresan mi ser, un ser que no se expresa a otros de tal modo, escribir es lo único tan puro, tan mío, que siento que es una piedra tan brillante dentro de mi corazón, dicen que la poesía y el escribir es un don, si lo tengo eso no lo sé, porque me mencionan tanto lo que no tengo que no sé si lo tengo, lo que sé es que al escribir me traslado a mi interior; un interior que muchas veces olvido.
Desearía la valentía de aquellos que salen a encontrarse con ellos mismos sin importarles lo que dejan atrás, o el qué dirán, valentía y recursos que no poseo, de fuerza que falta, de brazos cansados, de mejillas mojadas, de ojos que no cierran sus cascadas por más que trato, donde la que te escucha es solo la almohada, que te sostiene, y seca mi rostro, diciéndome duerme ya mañana es otro día, un día que pienso que es uno más para tratar de complacer a otros.
Un saludo