Poner a prueba nuestro hardware no es una idea que se nos acabe de ocurrir. Seguro que esa misma idea ha pasado por tu cabeza alguna vez. Uno de los objetivos de los test de stress es el determinar si nuestro hardware es capaz de funcionar correctamente incluso en la situación de máxima carga de trabajo. Así podemos saber si todo está bien o si por contra algo falla, por ejemplo un módulo de RAM que falla o una CPU con problemas de refrigeración.
En Linux podemos hacer esta prueba directamente en nuestro terminal. Necesitamos un pequeño programa llamado stress. Para instalarlo basta con escribir sudo apt-get install stress
Con stress podemos poner a prueba diferentes areas de nuestro hardware. Desde sobrecargar a nuestra cpu a llenar nuestra memoria RAM o hacer pruebas de escritura en nuestro disco duro.
Por ejemplo, escribiendo stress -c 4 -m3
estamos poniendo al 100% nuestra cpu de cuatro núcleos y llenando nuestra RAM con 3 ficheros de 250MB.
También podemos limitar el tiempo de ejecución de la prueba añadiendo el parametro -t seguido del tiempo en segundos que deseamos para nuestra prueba. Ejemplo: stress -c 4 -m 2 -d 1 -t 40s
Si algo falla stress nos mostrará un breve mensaje en pantalla. No muestra mucha información, prácticamente nada, pero, si nuestro PC se queda frito, nos da una pista de que algo no va bien.