Ya hemos hablado de cuáles son las lesiones más comunes en la práctica deportiva. Hoy os contaremos que debes tener en cuenta si quieres prevenir las lesiones deportivas.
1. El calentamiento y estiramiento de los músculos es fundamental antes de comenzar cualquier actividad física. Este tipo de ejercicios y movimiento suaves nos ayudarán a que el cuerpo se vaya preparando para la tarea principal de mayor intensidad y evitar así el riesgo de lesiones.
Un buen calentamiento no debe durar menos de 15-20 minutos y se debe comenzar con ejercicios suaves donde poco a poco se va aumentando la intensidad.
Deberemos además comenzar con un calentamiento general, destinado a la preparación de todo el organismo (carreras suaves, movilidad articular, estiramientos, etc.) para posteriormente realizar un calentamiento específico, donde incidiremos más en músculos que vayan a ejercitarse más en nuestra actividad principal.
2. Utiliza un equipamiento adecuado en la práctica de deporte y recuerda utilizar el calzado adecuado. Existen cientos de distintos modelos de zapatillas en el mercado y saber cuáles comprar puede resultar complicado. Deberás tener en cuenta la disciplina deportiva que vayas a realizar, la superficie donde la vayas a realizar, o la morfología de tu pie.
3. Realiza estiramientos después del ejercicio para que los músculos y las articulaciones reduzcan su intensidad por el esfuerzo y vuelvan a su estado natural. Esta etapa de enfriamiento debe durar entre 5 y 15 minutos y debe consistir en caminar y estirar los músculos que hemos usado durante el ejercicio.
4. Conoce la técnica del ejercicio y si es necesario revise esa técnica con un entrenador o experto. Muchas veces que nos apuntamos al gimnasio para hacer ejercicio y mejorar nuestra salud nos encontramos con máquinas que no sabemos utilizar. Estas maquinas están diseñadas para realizar el ejercicio en una posición correcta y determinada. Realizarla de otra manera podría ocasionar lesiones musculares, de espalda, hombros, etc.
5. Es importante que conozcas tus límites y, poco a poco, de acuerdo a su capacidad, incremente la intensidad. De igual forma, es importante que sepa cuando detenerse. Un gran sobresfuerzo sólo le ayudará a provocar un tirón o distensión muscular.
6. Acude a un quiropráctico. Los quiroprácticos no sólo tratan las lesiones una vez se han producido, sino que además ayudan a prevenirlas.
¿Eres deportista? Pon en marcha estos consejos de cómo prevenir las lesiones deportivas y disfruta de tu hobbie sin interrupciones y por mucho tiempo.