Con el tiempo, las cocinas vitrocerámicas por inducción pueden comenzar a presentar algunos fallos. Si tienes problemas con tu placa de inducción y quieres saber si puedes arreglarla por tu cuenta, en este artículo te damos algunas claves y consejos para saber si puedes reparar placas de inducción sin necesidad de ayuda profesional.
En primer lugar, debes saber que los problemas en las placas de inducción no son, por lo general, fáciles de solucionar. Esto se debe a que hay muchas averías posibles y a que la mayoría de las reparaciones implican la sustitución de algunas partes. Por ello, tampoco hay mucho que se puede hacer a nivel doméstico para solucionar el problema. Estadísticamente, la principal razón de la insuficiencia de las placas de inducción son los fallos en el sistema de calefacción.
En cualquier caso, se debe tener cuidado antes de intentar reparar placas de inducción y garantizar, precisamente, que la misma está apagada, o cortar la alimentación del equipo. A continuación veremos los varios tipos de problemas posibles.
Placa de inducción no enciente: mantenimiento del fusible
Si tu placa está recibiendo alimentación pero no funciona, el problema puede estar en el interruptor. En la mayoría de los diseños, estos fusibles se encuentran en la parte superior de las placas de inducción. Por ello, para cambiar el fusible de la vitrocerámica, hay que quitar las bandejas de goteo e identificar el conjunto del fusible.
Si la placa tiene elementos como luz, elementos de calefacción, reloj y el sistema de auto-limpieza, el problema puede estar en cualquiera de ellos y, por lo general, estos son los componentes individuales. En estas situaciones, para reparar las placas de inducción, simplemente reemplaza el fusible quemado, es decir, retíralo y reemplázalo por uno nuevo del mismo tipo y potencia eléctrica.
Error en la fuente de calor
Por lo general, cuando la avería tiene que ver con la fuente de calor y los componentes responsables del calentamiento están en la placa, no es fácil reemplazarlos. En cualquier caso estos serían los pasos a seguir:
- Antes de proceder a la sustitución, asegúrate de que la unidad no está recibiendo alimentación.
- Para reparar placas de inducción con este problema, comprueba primero el cable de alimentación y el enchufe.
- Luego comprueba si el dispositivo de fusión es defectuoso. En la mayoría de los diseños, los elementos de calor del sistema están conectados a un bloque terminal.
- Retira los tornillos de la placa de metal para obtener acceso.
- Haz la prueba con un voltímetro.
- Desconecta uno de los cables de cada elemento.
- Si la lectura es extremadamente alta (por encima de 125 voltios), el elemento es defectuoso y necesita ser reemplazado.
- Si todos los elementos pasan la prueba, pero todavía no funciona, entonces el problema debe estar en los terminales.
- En este caso, asegúrate de que los terminales estén limpios y apretados en las conexiones de los elementos.
Para completar la misión a solas, siempre tendrás que retirar el elemento dañado o quemado y comprar uno nuevo. Debes saber la marca y el modelo de tu placa de inducción para adquirir piezas nuevas adecuadas.
Una vez que tengas los recambios de la placa de inducción, debes colocar el nuevo elemento en la misma posición que el anterior. Enchúfalo exactamente de la misma manera que estaba el anterior, utilizando los mismos tornillos para fijar la parte nueva en su lugar.
Averías de placas de inducción más raras
Aunque no es tan común, si la placa no está calentando es posible que la unidad no esté recibiendo alimentación adecuada. Las placas de inducción requieren 220 voltios de corriente alterna. Si, por alguna razón, tu placa está recibiendo una tensión significativamente menor no calentará. Por lo tanto, también se puede hacer la comprobación de la tensión adecuada usando un voltímetro.
Si ninguna de estas comprobaciones es suficiente, te recomendamos consultar a empresas y profesionales del sector para reparar placas de inducción sin mayores complicaciones. Puedes encontrar a profesionales de la reparación de electrodomésticos que estés disponibles en tu zona haciendo un pedido de presupuesto gratis. Una vez que les cuentes el problema, podrán darte un presupuesto por la reparación e, incluso, recomendarte si vale realmente la pena reparar la vitrocerámica de inducción o si es más rentable sustituirla. En este último caso, puedes comparar previamente los modelos y precios de placas nuevas disponibles en el mercado para tener una idea.