Cuando decidiste quedarte embarazada, también estabas segura de que querías amamantar. Tal vez resultó difícil adquirir el hábito de la lactancia, pero a la mayoría de las madres les resulta más complicado retirar el pecho. Es un momento esperado y que tendría que llegar tarde o temprano.
No se puede establecer una regla del momento oportuno del destete, no obstante, los bebés dejan generalmente de tomar pecho entre los 12 y 24 meses. Son ellos quienes empiezan a dar muestras significativas de que ha llegado el momento del destete, porque se interesan por otros alimentos, y al probarlos pierden el interés por mamar. Suelen utilizar el pecho más como un momento de confort y recogimiento con su madre, que no de necesidad alimentaria.
Para evitar problemas, es conveniente hacerlo de manera gradual y progresiva.