Cómo saber si eres normal

La principal razón por la que alguien te parece normal es porque no lo estás viendo suficientemente cerca.

Muchas personas quieren actuar según creen que deben actuar, siguiendo las pautas de lo que es normal. En las conversaciones que tengo con mis clientes, muchos se sienten incómodos (por usar una expresión suave) al pensar que el resto de personas son normales y ellos no.

Pero se engañan, porque nadie es normal según los estándares de normalidad. Al menos, nadie que yo conozca.

Sin embargo, queremos comparar nuestra vida interior con la representación exterior de los demás, y así nos va.

Queremos que nuestra mente esté tan en paz como parecen estar las de los demás y eso es como querer que nuestras vísceras presenten un aspecto bronceado y suave.

Vemos a otros hacer cosas y queremos hacerlas con la misma facilidad, sin luchas internas y sin sentirnos culpables, pero nadie sabe qué es lo que hay dentro de la mente de la otra persona.

Ayudo a las personas a conocerse y creo que no me equivoco al decir que, cuando nos parece que una persona está en armonía total es porque no hemos mirado en el lugar adecuado.

Interpretando mi experiencia, llego a la conclusión de que todos tenemos luchas internas. Deseos que frenamos, actos de los que nos arrepentimos, pensamientos que no nos gustan, sentimientos contradictorios.

La paz llega cuando se aceptan y se gestionan estas contradicciones, no cuando se lucha contra ellas.

Animo a mis usuarios, de todas las edades, a dejar de luchar contra uno mismo defendiendo el ideal de que los otros son más normales.

¿Qué puedes hacer si te consideras menos normal que el resto?