¿Cómo saber si tengo difteria?
Recientemente conocimos en España el primer brote de difteria en niños en 30 años, una enfermedad que se creía haber eliminado. La enfermedad infantil fue erradicada en España gracias a los programas de vacunación que imponen las autoridades médicas a los padres como rutina.
Los medios de comunicación informaron de que el niño afectado estaba siendo tratado en el hospital Vall d’Hebron de Barcelona y que no había sido vacunado. El tétanos, la difteria y la tos ferina son enfermedades muy graves y la vacuna es indispensable pues es la única forma de protegerlos.
La difteria es una infección respiratoria aguda muy grave con una alta tasa de mortalidad. Las bacterias se asientan en el revestimiento de la garganta o la nariz donde proliferan y segregan una toxina de veneno. Las bacterias y la toxina destruye el revestimiento, el resultado es finalmente un severo dolor de garganta y la formación de recubrimientos gruesos. Los forros membranosos de la garganta pueden obstruir las vías respiratorias, causando dificultad para respirar y posiblemente asfixia. Esta toxina entra en el cuerpo y puede provocar daños en el corazón y en el sistema nervioso.
Esta enfermedad se transmite por las gotitas de la nariz o de la garganta, es capaz de propagarse entre personas con facilidad, por ejemplo, por tos o estornudos. Las posibilidades de contraer esta enfermedad aumentan si no están protegidos por los anticuerpos, que se logran mediante la vacunación.
¿Cómo detectar la Difteria?
El período de incubación es de dos a cinco días.
Los síntomas locales consisten en dolor de garganta, tos y dificultad para respirar.
Los trastornos generales incluyen fiebre, debilidad y fatiga.
De la segunda a la sexta semana, la enfermedad puede provocar daños en el corazón y el sistema nervioso en forma de parálisis. En el peor de los casos, puede conducir a alteraciones en el ritmo del corazón, hasta llegar al paro cardíaco.
La mortalidad es alta en los países pobres, hasta un 30-40 por ciento. En los países occidentales, hay una tasa de mortalidad de alrededor del 10.5 por ciento, principalmente debido a que la enfermedad es rara y en un principio confundirse con otras infecciones, por lo que el tratamiento no se inicia en el tiempo.
¿Qué se puede hacer para prevenir la enfermedad?
La principal forma de evitar contraer la enfermedad es mediante la vacunación . Los niños cuentan con un programa de vacunación infantil para protegerlos contra la difteria, el tétanos y la tos ferina. Se recomienda suministrar la vacuna entre los 3, 5 y 12 meses de edad. La vacuna contra la difteria se da de nuevo a la edad de 5 años.
Para diagnosticar la Difteria.
Es preciso realizar una prueba por un medio de un cultivo que es analizado en el laboratorio, también es posible detectarla en el ADN mediante una prueba de sangre. Si los resultados son positivos, su caso debe ser reportado a su médico de cabecera y a las autoridades como parte de la vigilancia de las enfermedades graves.
Perspectivas de futuro
Si el tratamiento se inicia rápidamente y se evita la asfixia, existe una mayor posibilidad de que la bacteria puede ser erradicada por el paciente y que la toxina no influya en el corazón o el sistema nervioso.
A nivel mundial, la difteria enfermedad probablemente sea difícil de erradicar, en parte debido a las bacterias como las de tos ferina que podría extenderse incluso entre personas sanas y vacunadas.