Revista Coaching

Cómo sacar el mayor provecho de la vida al trabajar jornadas largas

Por Coach2coach @Esther_Roche

Esto no tiene por qué significar que tu vida se desequilibra. Encontrar maneras de usar esas preciosas pocas horas dedicadas a la “vida” puede marcar la diferencia entre la productividad y el agotamiento.

Estas son algunas claves para mantener una vida saludable durante estos períodos.

Dormir intencionalmente

Lo primero que debes planear es dormir. No te quedes sin tus merecidas horas de sueño pensando que dormirás cuando termines el trabajo.

Cómo sacar el mayor provecho de la vida al trabajar jornadas largas

La mayoría de las personas requieren de siete a nueve horas de sueño, con efectos negativos que se agravan, mientras más sueño sacrifican. La infelicidad se establece cuando la persona exhausta come mal para compensar el estado de ánimo y la fatiga. La productividad cae en picado. Los niveles hormonales desencadenan el almacenamiento de grasa y la degradación muscular.

Se intencional sobre tu sueño. Usa un despertador inteligente o una aplicación que pueda ayudarte a despertarte durante una fase de sueño ligero. Practica una buena higiene del sueño con las rutinas para irte a la cama, la reducción de la luz, el uso limitado de la tecnología una hora después de acostarse y los tés de hierbas que ayudan para dormir.

Establece un tiempo para calmar tu mente a través de la meditación o la oración. Si debes trabajar una gran cantidad de tiempo, seguir el mismo horario de sueño todas las noches ayuda a entrenar a tu cuerpo para dormir en ese momento.

Comer correctamente

Lo que comes tiene un gran efecto en lo productivo que eres. La investigación ha demostrado durante mucho tiempo que las calorías vacías, como jugos, gaseosas, panes, pastas y alcohol, te dan ráfagas de energía. Sin embargo, acto seguido experimentarás una fuerte caída de energía, que afecta negativamente la productividad durante todo el día.

Los médicos recomiendan ingerir más alimentos ricos en nutrientes (carbohidratos complejos como frijoles, arroz integral y verduras), ya que el cuerpo tarda más en digerir y, por lo tanto, le proporciona un flujo de energía más estable, lo que puede ayudar a aumentar la productividad.

Además, asegúrate de beber suficiente agua. Los médicos dicen que debes tener alrededor de un galón diario (de tres a cuatro litros). Es posible que desees hablar con tu médico sobre la cantidad que sea mejor para ti.

Otros trucos que pueden aumentar la productividad incluyen: Precocinar las comidas una vez por semana, comer las mismas comidas una y otra vez, y ayunar ocasionalmente.

Ejercítate inteligentemente

Un área que muchas personas sacrifican cuando se enfrentan a grandes cargas de trabajo es el ejercicio. Esta no es una buena idea, ya que el ejercicio es importante para mantener tu productividad. Está relacionado con un menor estrés, una mayor creatividad, una memoria más nítida, una concentración mejorada y más.

La clave está en ser inteligente acerca de programar el ejercicio, no de cortarlo. Aquí hay algunos consejos para mantener la rutina de ejercicio constante, incluso en medio de una vida laboral ocupada.

  • Hazlo corto, para que puedas sacar provecho en un día agitado.
  • Trabaja en un lugar fácil de encontrar.
  • Si tu lugar de trabajo ofrece un gimnasio, úsalo.
  • Usa una de varias aplicaciones que te permiten adaptar sesiones de entrenamiento cortas que se ajusten al tiempo asignado.
  • Trata de entrenar a la misma hora todos los días y mantén tus rutinas lo más discretas posible.
  • Establece tu ropa de entrenamiento por adelantado y mantenla organizada.
  • Si no puedes ir a un gimnasio, haz uso de tu hogar para comenzar tu entrenamiento.

Mientras trabajas, toma momentos para hacer series de ejercicios: estiramientos, correr en el lugar, usar las escaleras en lugar de un elevador, flexiones, crujidos, saltos o flexiones si tienes una barra. Trae una pelota de yoga si estar parado no es una opción. Convierte el proceso de sentarte y ponerte de pie en un ejercicio de sentadillas.

Haz tiempo para familiares y amigos

Por último, pero no menos importante, no sacrifiques las relaciones importantes en la vida por tu trabajo. Determina las personas que necesitas priorizar y programa el tiempo con cada una de ellas. Hagas lo que hagas, asegúrate de no renunciar a esto.

Ten en cuenta que, para empezar, las personas que son importantes para ti deben beneficiarse de todo tu arduo trabajo. A largo plazo, estas relaciones son más importantes que el trabajo, sin importar cuánto dinero ganes.


Volver a la Portada de Logo Paperblog