De vez en cuando salen en los periódicos noticias sobre algún perro que muerde a alguien. Probablemente también conozcamos casos de perros que han dado algún susto a alguno que con toda su buena intención quería acariciarlo (¡los niños!).
¿Por qué? Muchas veces se trata de perros tímidos o mal socializados, que desconfían o tienen temor respecto de aquellas personas que no conocen. En estos casos, y a pesar de que con su lenguaje corporal están enviando señales de advertencia o de que le dejen en paz, el humano no se da cuenta y hace lo peor que puede hacer: seguir atosigando al perro con toques, caricias o restringiéndole su espacio. Al perro, que muchas veces tampoco puede huir, no le queda otra salida, más que marcar el mordisco.
Conociendo esas señales (lamerse los labios, gruñidos, boca cerrada y tensa, ladear la cabeza, cola baja, etc), se podrían evitar muchos sustos.
Para saber cómo acercarse a un perro y poder acariciarle, os dejamos este video bien sencillo que ofrece algunas sugerencias: