Revista Salud y Bienestar
Investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington en St. Louis han descubierto nuevos detalles sobre cómo se desarrolla el epitelio olfativo. El nuevo conocimiento podría ayudar a los científicos a probar que los cornetes y el área superficial más grande resultante del epitelio olfativo es quien determina como se perciben los olores. El estudio, publicado en la revistaDevelopmental Cell , también podría ayudar a responder una pregunta evolutiva de larga data: ¿cómo los sentidos del olfato de los animales se volvieron tan enormemente variables?. El estudio descubrió que una célula madre recientemente descubierta, denominadas células FEP, controla el tamaño del área superficial del epitelio olfativo. Estas células madre también envían una molécula de señalización específica a los cornetes subyacentes, diciéndoles que crezcan. La evidencia sugiere que esta diafonía de señalización entre el epitelio y los cornetes regula la escala del sistema olfativo que termina desarrollándose, a veces dando como resultado epitelios olfatorios con áreas superficiales más grandes, como en perros. Cuando las células madre no pueden señalizar adecuadamente, el crecimiento de los cornetes y el área superficial del epitelio olfativo experimentan un desarrollo detenido.