Para empezar a prepararlos necesitaremos una esterilla de bambú sobre la que trabajaremos.
Alga Nori, si es tamaño grande, la cortamos por la mitad y colocamos su parte brillante sobra la esterilla.
Con las manos húmedas, cogemos arroz y lo esparcimos por el alga, tratando de dejar un pequeño margen de seguridad, tal que así:
Esparcimos semillas de sésamo si se desea y a continuación cogemos tiras de salmóny lo extendemos de una punta a otra en horizontal, justo en medio de la superficie de arroz.
Con la ayuda de la esterilla, damos una vuelta (con los dedos, justo antes de cerrar el rollo, intentamos sujetar el relleno para que se mantenga en el centro), procuramos que la parte inferior del alga nori toque la parte superior del arroz. Con la esterilla cubriendo el maki (que es como se llama este tipo de sushi), usamos la otra mano para humidificar la parte sobrante (margen de seguridad) del alga nori. En seguida le damos media vuelta para cerrarlo. Y vualá, este es el resultado:
Lo cortamos en seis u ocho piezas. Y listo, a comer, lo ideal es hacerlo con palillos de madera para que no se altere el sabor de la comida con el utensilio metálico y acompañado de wasabi y gari (jenjibre encurtido). Ponemos soja en un recipiente pequeño donde podemos mojarlo y entre bocado y bocado se recomienda comer gari para limpiar el paladar de los sabores anteriores.
Si están en Lanzarote les recomiendo sin duda este taller para principiantes que imparte Sushi Bar Minato cada miércoles en Puerto Calero.
Muy interesante el haber aprendido un pelín la técnica, aunque sin duda yo preferiré seguir dejando en manos de expertos la tarea y disfrutar comiendo este manjar.