Sembrar la Luna, esa sangre menstrual, esa luna roja que contiene vida, nutrientes y es un potencial abono para nuestras plantas, te permite la oportunidad de liberarte de cargas emocionales que tuviste durante tu último período, ese donde te pego la luna y quizás sentiste ganas de llorar, de bailar, de reir, de gritar, de meterte en un hueco bajo tierra sin que nadie te viera, de comer muchos chocolates o quizás mango con sal. El momento ideal, para conectarte con tu ser, mujer salvaje, experimentar al máximo tu feminidad, tu intuición, la reflexión, la conexión con tu ser interior, el momento creativo y creador.
Para sembrar la Luna, no necesitas más que recolectar tu sangre menstrual, bien sea a través de una toalla de tela o una copa menstrual.
¿ Cómo Hacerlo?
1.- Si usas toallas de tela, luego de usarlas pon tu toalla en remojo con agua fría, usa esta agua con tu sangre menstrual para regar tu jardín , sino tienes jardín, puedes escoger una planta de las macetas de tu casa o apartamento.
2.- Si usas copas menstruales , tendrás un contacto más directo con tu sangre menstrual recolectada en la copa y que de una vez puedes vaciar para regar tus plantas.
NO VUELVAS A DESECHAR TU LUNA EN LA BASURA, ahora sabes que puedes sembrarla y lo bueno que es para ti y el cuidado de la madre tierra.