Piensa en un distribuidor de cosméticos o en uno de ropa, sus productos pueden conseguirse en otros lugares y con otros precios entonces: ¿por qué alguien quisiera comprar específicamente en ese sitio?
La respuesta sería: por su propuesta de valor. Eso es lo que los hace diferentes de todos los demás. Así que ya sabes, cuando el producto en sí no es el diferenciador es hora de activar la creatividad comercial.
Las características que tiene un producto no son las únicas razones por las que alguien quisiera comprarlo ya que la mayoría de la gente compra en particular por el sentimiento que ese artículo o servicio le satisface.
1. Genera un sentimiento
Incluso algo tan genérico como la venta de huevos puede marcar una tremenda diferencia cuando se decide innovar, por ejemplo: los huevos Bonneg con antioxis ideales para la piel y la memoria.
2. Crea estilo propio
El hecho de que estés vendiendo un producto que existe en el mercado no significa que tienes que comercializarlo de la misma forma. Puedes cambiar la forma de entregar un mismo producto, ya sea cambiando su nombre o agregando "la fresa en la cima que nadie tiene".
3. Vende una causa
En este tema la marca TOMS tiene una excelente iniciativa ya que por cada par de zapatos que compres para ti, ellos regalan uno a un niño que no tiene.
Las personas apoyan las causas nobles así que podrías donar algo de lo que tienes a quien necesita y al mismo tiempo vender mejor.
4. Sé controversial
Cuando el mercado tiene mucha demanda, la publicidad enfocada a ese segmento suele ser más costosa. Una forma de obtener publicidad gratis por medios como la televisión o la radio es ser controversial; por ejemplo: cuando Richard Branson se vistió de novia para la inauguración de una de sus tiendas obtuvo toda la publicidad gratis que ese local necesitaba para darse a conocer.
Ser controversial es como una espada de dos filos, solo que antes de hacerlo asegúrate siempre de que sea a tu favor.
5. Cambia procesos, diseños y entrega
En las ciudades se hace cada vez más raro encontrar algo "hecho a mano". Además de que este mensaje te comunica calidad y exclusividad, la forma de empacarlo puede ser más creativa.
Por ejemplo: entregar un collar hecho a mano en una caja de 12″ y que al abrirla haya un destello de confeti hace una gran diferencia de los demás.
6. Transforma la experiencia
Muchas empresas están dejando dinero sobre la mesa por no aplicar una experiencia inolvidable para sus clientes, me he dado cuenta que en muchos lugares se subestima el alcance que tiene la opinión de un cliente sobre sus ventas, el solo hecho de tener un detalle por el cliente o por sus hijos hace una diferencia numérica notable; por ejemplo, son muy pocos los spa dentales, donde hacen del dentista una experiencia agradable.
Incluso hace un tiempo atrás tome un taxi que tenía tantos clientes privados que casi no necesitaba hacer paradas, al subir me di cuenta de que sobre el panel que está frente al asiento delantero tenía una pequeña taza transparente con chicles adentro y un letrero que decía "si quieres toma uno" sumado a esto, la música con ritmo y los vidrios oscuros que atenúan el sol, hacía que viajar en no fuera estresante.
7. Sigues tú
Acabas de comprobar que siempre puedes ser diferente, no importa lo que vendas lo que importa es cómo lo vendas porque ese "cómo" es lo que tus clientes van a comprar.
Fuente: entrepreneur