Al igual que en los entornos prepandemia, el teletrabajo también exige incorporar algunas acciones para hacer más a favor de la sostenibilidad.
Aunque la pandemia parece estar dando sus últimos coletazos durante 2021, las nuevas fórmulas de trabajo han llegado para quedarse. Muchos empleados seguirán realizando sus funciones desde casa, y las empresas deberán adaptar a esta situación los protocolos de sostenibilidad que comenzaban a aplicar en el entorno prepandemia.
Este esfuerzo cobra especial importancia si se habla de los pequeños emprendedores y los autónomos. La sostenibilidad es una preocupación que afecta al conjunto del ecosistema emprendedor, y debe ser tratado como tal. En este sentido, la Fundación Vida Sostenible ha realizado un estudio en el que compara el impacto ambiental del trabajo antes de la pandemia y el actual.
Como principales conclusiones, el estudio pone de manifiesto el importante efecto positivo del teletrabajo en la sostenibilidad. Este factor, sumado al aumento del comercio electrónico y la reducción de los viajes laborales, ha supuesto una gran mejora del impacto ambiental del trabajo. Sin embargo, aún quedan algunos aspectos que mejorar desde casa.
La sostenibilidad en el teletrabajo
La Fundación Vida Sostenible ha utilizado las conclusiones de su estudio para elaborar una “Guía de Buenas Prácticas para pymes y autónomos” en términos de sostenibilidad, publicada por el Ministerio de Trabajo, y que pretende ayudar a seguir reduciendo el impacto ambiental de las empresas, también si sus empleados trabajan desde casa.
Iluminación. En este apartado, la guía explica cómo los trabajadores se han tenido que adaptar a “montar una oficina” en sus casas. En este sentido, trabajar en una zona del hogar con buena iluminación natural es clave. Aunque, si no se puede, utilizar lámparas led podría ayudar a reducir la huella ambiental del teletrabajo.
Producción de residuos. Este es uno de los temas que más pueden afectar a la sostenibilidad si se teletrabaja. Pasamos muchas más horas del día en nuestras casas, lo que puede conllevar un aumento significativo de la cantidad de residuos que producimos. Por eso, prestar especial atención al reciclaje y al consumo de productos con embalajes contaminantes es clave a la hora de reducir el impacto ambiental si se trabaja desde casa.
Paquetería. La llegada de la pandemia y la implementación masiva del teletrabajo ha supuesto un aumento notable de las cifras de negocio de las empresas de paquetería. En este sentido, la Fundación Vida Sostenible recomienda organizar bien las entregas, procurando “que se hagan a la vez y no fomentar viajes de más”. Además, es interesante priorizar proveedores cercanos y sostenibles, así como empresas de mensajería que cuenten con una flota de vehículos híbridos o eléctricos.
Transporte. Aunque el teletrabajo ha llegado para quedarse, lo cierto es que, en algún momento, los trabajadores tendrán que salir de sus casas para acudir a reuniones presenciales, viajes de empresa… Por eso, fomentar una cultura interna que ponga en valor los medios de transporte alternativos (bicicleta, transporte público…) o compartir coche es un punto muy a favor de la sostenibilidad.
Aunque muchas de estas prácticas pueden aplicarse por los propios trabajadores sin necesidad de la empresa, lo cierto es que los emprendedores no dejan de ser responsables de las necesidades de sus empleados durante el horario laboral, aunque se realice desde casa. En este sentido, elaborar unas guías de actuación en temas como la sostenibilidad o la salud puede ser un buen punto de partida.
Fuente: emprendedores.es/gestion