El primer paso que di hacia esa transformación fue emprender y trabajar por cuenta propia. Una vez realizado ese sueño, comencé a incluirme en el calendario del día a día. Estaba cansada de estar cansada por lo que era lógico que debía hacer algo urgente para recuperar mi yo. Organicé mi agenda y diariamente hago algo mío y para mí. Nada que tenga que ver con trabajo, blog, ser mamá o esposa. Algo tan simple como caminar 5 minutos, tomar el café sola en la terraza, poder leer mis libros favoritos, bañarme sin prisa, entre otras.
Mi compromiso con mi salud.
Mi meta es ser una mamá saludable en todos los sentidos: mental y físicamente. Entre mis objetivos estaba encontrar un lugar donde me ayudaran a mejorar mi alimentación y que al mismo tiempo pudieran consentirme. Una amiga me recomendó un spa donde realizan tratamientos corporales, masajes y faciales. Se llama 360 Wellness Spa y tengo que decir que mi primera cita fue realmente una experiencia 360.
Pedí uno de sus tratamientos que se llama Lipomassage (que duró cerca de 40 minutos) y luego me llevaron a una máquina para hacer 10 minutos de ejercicios.
Aunque se ve sencilla, déjame explicarte que 10 minutos de ejercicios en esta máquina equivale a una hora de cardio. ASÍ COMO LO LEES. Han sido los 10 minutos más intensos de mi vida pero, ¡vaya que valió la pena!
Luego me orientaron sobre la alimentación y lo que debía hacer en casa para mantenerme saludable, comer más orgánico y comenzar a atacar la celulitis que se ha apoderado de mis caderas.
Hablé con la propietaria del spa y solicité autorización para grabarme y tomar fotos del proceso, así que estaré compartiendo detalles aquí en el Blog y en las redes sociales de sermadrepr.
Y tú, ¿sacas tiempo para ti? ¿Hace cuánto tiempo no has ido a un spa?
Nota de transparencia: SerMadrePR no está reciendo compensación económica por este post. Solo comparto y compartiré mi experiencia con la meta de ser una mamá saludable.
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