Volví de Alemania a Almería. Quería trabajar en algo urgente para poder invertir en el blog y en otros proyectos web que voy a lanzar. Confié en que lo que vendría iba a ser una nueva experiencia que iba a enriquecerme. Cuatro días más tarde le ofrecieron un trabajo a mi prima: 24 horas diarias, cuidando dos viejitos. Como ella no podía, lo tomé.
El lugar estaba en medio de las montañas de Berja, no tenía señal de ningún tipo, y la señora que me recibió era muy negativa. Como si fuera poco, solo podía salir de allí los domingos. De modo que no estaba segura de aguantar el mes entero.
Me pasaba los días leyendo y estudiando, viendo las montañas y caminando con el señor, quien cada día me decía que tenía una edad diferente. Pueden ver el video que hice, de una recopilación de grabaciones en las que responde todos los días cuantos años tiene, aquí.
Fue un mes bastante largo, pero lo logré. Y sí, viví una experiencia que me enriqueció en servicio, silencio, planificación, voluntad y paciencia.
Me encontré bastante con la personita que tengo adentro, y me dijo muchas cosas que antes quizás no quise escuchar. Aunque no volvería a aquel cortijo ni porque me pagaran el triple de lo que recibí, reconozco que me sirvió y utilicé todo para avanzar.
Los viejitos se llaman Visita y Julio, vivieron siempre allí, los demás cortijos están habitados por Alemanes, Británicos, Holandeses, todos adultos mayores que disfrutan la naturaleza y la tranquilidad.
También vagué en mi mente sobre el tema de la vejez y lo importante que es cuidar el cuerpo en los años de juventud. El pensamiento constantemente negativo destruye el cuerpo, es el caso de esta señora, el reflejo de su diálogo interno es su estado corpora y mental (problemas de huesos, depresión, azúcar, etc) . En cambio, el señor que no se preocupa demasiado, es tranquilo y solo dice cosas lindas, tiene un buen estado corporal, aunque haya perdido un poco la memoria.


Más allá de todo esto, el marco de trabajo era un paisaje hermoso que favorecía meditar y descontracturar la mente.
El lugar no es para nada turístico, hay muchos invernaderos y el río lleva poca agua.





Y sigo en el camino, ¡gracias por leerme!