Revista Opinión

Cómo vivir en democracia y no perder tu poder

Publicado el 22 junio 2012 por Cavalleto

Es complicado el hecho de vivir en una sociedad democrática y a la vez aceptar que tienes que ceder gran parte de tu poder de decisión. La democracia, básicamente, sirve para proteger a las minorías, poco más. Pero ese fundamento se comienza a viciar en el momento en el que el Estado determina cómo tienes que vivir.

Cada vez tenemos menos poder de decisión. Nos encorsetan y nos dan a elegir entre muy pocas opciones, y si alguien “osa” mostrar su disconformidad se le aparta, se le margina. Hoy es el Estado quien decide por tí en muchos momentos de tu vida, y eso es una gran putada.

Imagina que te vas a vivir a un país donde no hay ningún calvo, y llegas tú con tu familia y tu calva. Lo primero que hace el Estado es quitarte la patria potestad de tus hijos porque no pueden criarse en una familia donde el padre es calvo. Exagerada la situación, tal vez, pero casos tan surrealista como este suceden a diario en paises democráticos y a nadie le importa. Bien es cierto que siempre hay un argumento de fondo que busca el bien de los hijos, pero bajo ese argumento se pasan casos de todo tipo.

Lo último que leí es que a un padre canadiense le han retirado la custodia de dos hijos… por ser gordo. “Pesa 163kg y cuidar de sus niños de 5 y 6 años es demasiado trabajo para una persona de su corpulencia”. Y lo peor es que el padre no podrá tener contacto con el centro donde quedarán los niños al menos durante 2 años.

¿Hasta qué punto un Estado puede pasar por encima de un individuo? No voy a defender a este señor, al igual que no defiendo a las madres adolescentes yonkis que pierden la custodia porque no tienen ni para alimentar a sus hijos. Pero estos son casos que me hacen recapacitar sobre lo dramático que puede llegar a ser tu vida en un país donde, a priori, todo deberían ser beneficios y ventajas por ser una democracia que vela por las minorías.

Lo peor de todo es que no hay alternativas menos desastrosas que la democracia, aunque algún día alguien debería buscar algo mejor que esta mierda de sistema.

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