En 1919 la Compañía Urbanizadora Metropolitana, propietaria del Ferrocarril Metropolitano de Madrid, adquirió unos terrenos situados entre la glorieta de Cuatro Caminos y la finca los Campos de Moncloa, con el eje central del tramo del Paseo de Ronda, actual Avenida de la Reina Victoria, en el borde exterior comprendido en el Plan Castro como límite del Ensanche noroccidental de la capital. La Compañía planificó una operación urbanística de claro carácter especulativo que consiguió del Ayuntamiento el permiso de sobrepasar las alturas máximas contempladas en las ordenanzas del Plan debido a su situación limítrofe. En la zona se construyeron bloques en altura de hasta 35 metros, un “Parque urbanizado” de viviendas unifamiliares aisladas, al final de Reina Victoria; y bloques en altura, que por estar dentro del área del Plan Castro, no pudieron sobrepasar los 25 metros.
Vista del Paseo de Ronda con los edificios “Titanic” a la zquierda partiendo desde la Glorieta de Cuatro Caminos. A la derecha se ven las cocheras y el arranque del tunel de Ferrocarril Metropolitano (Cuatro Caminos-Sol). También se pueden adivinar las torres del Hospital de Maudes, al fondo en el centro. La foto es aproximadamente de 1922.
Entre los edificios más más altos, pertenecientes a las primeras construcciones, se encuentran los llamados Edificios “Titanic” de los arquitectos Julián Otamendi Machinbarrena y Casto Fernández-Shaw Iturralde, construidos en 1919, que destacaron en su día por su vocación de modernidad y lo avanzado de sus instalaciones y diseño, sustituyendo esos “antihigiénicos patios de luces” por verdaderas calles interiores perpendiculades a la Avenida a la cual daba su fachada, según el arquetipo de construcción de los racacielos norteamericanos.
Arranque del tunel de Ferrocarril Metropolitano (Cuatro Caminos-Sol) en construcción en El Paseo de Ronda (1918).
Además, la Compañía Urbanizadora Metropolitana construiría frente al “Parque urbanizado”, el Estadio Metropolitano, del arquitecto José Mª Castell, de 1923, ya desaparecido. Ya en los años cuarenta, la empresa pasó a denominarse Compañía Inmobiliaria Metropolitana, construyendo más edificios en esta zona de Madrid y algunos otros en la Gran Vía, como el Edificio “Los Sótanos” y en la Plaza de España, como el Edificio España, en su momento uno de los edificios más representativos de la España autárquica de los cincuenta, ambos de los arquitectos Joaquín y Julián Otamendi Machimbarrena.
Vista aérea del Estadio Metropolitano inaugurado el 13 de mayo de 1923. Estaba situado cerca de la actual calle Reina Victoria en la actual Plaza de la Ciudad de Viena, entre las calles Beatriz de Bobadilla, Santiago Rusiñol y el Paseo de Juan XXIII.
Cartel de anuncio de la Compañía Urbanizadora Metropolitana, año 1923. El talante demoledor del negocio inmobiliario, como se ve no es cosa solo de nuestros tiempos.