Comparación de “Las crónicas de Narnia” con “La Biblia”

Las crónicas de Narnia es una serie de libros escrita por C.S. Lewis, que está conformada por siete novelas que son: El león, la bruja y el armario; El príncipe Caspian; La travesía del viajero del Alba; La silla de plata; El caballo y el muchacho; El sobrino del mago y La última batalla. 

En realidad cada novela posee diferentes personajes, pero todos tienen en común que, por uno o dos motivos, se trasladan a Narnia y conocen a Aslan, el Dios creador de ese mundo que aparece con la apariencia de un león. En cada novela los protagonistas deben cumplir la misión que les encomienda Aslan ya sea enfrentándose a brujas, grupos rebeldes que invaden Narnia o restaurar reinados caídos.

Narnia y La Biblia.

La verdad pienso que esta saga posee muchas similitudes con la Biblia. Si bien cité los títulos en orden de publicación, la historia de Narnia realmente inicia con El sobrino del mago (El génesis) y La última batalla (El Apocalipsis). Incluso surgen diversos elementos propios del cristianismo, como la tentación, la creencia de un Dios todopoderoso, la muerte y resurrección del ser divino y la mención de Adán y Eva, refiriéndose a los protagonistas como hijos de Adán (en el caso de los niños) e hijas de Eva (en el caso de las niñas).

Lo que más me gustó de la saga fue que explora el tema de los universos paralelos, donde todo tipo de universo puede ser posible y cada uno posee sus propias leyes. Así es como, en Narnia, la Tierra sí es plana y las estrellas son pequeños seres vivos que flotan por el cielo.

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