Ahora es el momento, sin duda, de las impresoras 3D y todo lo que envuelve a este mundo. Aunque llevamos muchos años leyendo sobre el tema, es ahora cuando las grandes empresas del bricolaje empiezan a meterse y a invertir en lo que piensan que será la tecnología estrella de la segunda mitad de esta década.
Hay mucho movimiento pero también mucho desconocimiento en cuanto a cuán fácil es usar esta nueva tecnología. Es muy nueva y no deriva directamente de ninguna ya conocida, sino que ha aparecido de la nada (hablamos en entornos domésticos, a nivel industrial se han usado desde hace mucho), así que con esta comparativa vamos a intentar darte algunas ideas básicas para que aprendas algo sobre este mundo y puedas ver cómo está el mercado ahora mismo.
Nota: si crees que es un mundo interesante y quieres unirte al club, te animo a que consideres comprar alguna de las impresoras 3D que tenemos en venta en nuestra tienda.
Nota 2: hemos insertado enlaces de afiliación (eBay), para comprar algunas de las impresoras 3D, que nos ayudarán a financiarnos con una pequeña comisión si haces la compra a través de alguno de ellos.
En primer lugar tengamos claros los tipos de impresión 3D que podemos encontrarnos, al igual que la impresión normal en 2D (inyección de tinta, láser, etc…), aquí también tenemos diferentes formas de plasmar lo que queremos.
Tipos de impresión 3D
SLS
Selective Laser Sintering o sinterización selectiva por láser, es la técnica usada a nivel de prototipado industrial, que consiste en marcar con un láser, capa a capa, un material sensible a éste y que se endurece a su contacto, haciendo que conforme se van pasando las capas, vaya apareciendo el objeto planteado.
SLA
Stereolithography o estereolitografía, a nivel doméstico encontramos alguna pero no está tan extendida como el último método de impresión. Este es muy parecido al anterior (SLS), pero en este caso usamos un líquido fotosensible que endurece al contacto con la luz (láser).
FDM
Pinche aquí para ver el vídeo
Fused Deposition Modeling o modelado por deposición fundida, esta es la técnica reina en la impresión 3D doméstica y la que todos habremos visto. Consiste sencillamente en derretir plástico y pasarlo por lo que llamamos un extrusor, éste se va moviendo y depositando el material en la forma requerida. Al terminar una capa cambia de altura y empieza a imprimir la siguiente derritiendo más plástico.
Software para diseñar en 3D
Vale, tengo la impresora en mi casa y… ¿ahora qué hago?. Tienes dos opciones, o diseñas un objeto en 3D por tu cuenta, o te lo descargas de una tienda de objetos 3D (ver más abajo). Programas para diseñar en 3D hay muchos, pero te voy a dejar una lista de los más conocidos y usados:
- 3DTin, es una herramienta online y muy intuitiva.
- Thinkercad, también online y fácil de usar, quizás algo más tosca que la anterior, pero para empezar es lo mejor.
- Blender, el rey del diseño 3D sin ninguna duda, software libre, gratuito y con potencia para envidiar.
- OpenSCAD, otro buen software para la lista de modelado 3D.
- Grasshopper, igual que el anterior, libre, gratuito y muy recomendado.
- SketchUp, inicialmente ideado para temas de arquitectura y demás, pero puede ser usado para pequeñas piezas igualmente.
Una vez tengamos el objeto nos toca hacérselo entender a la impresora 3D, y evidentemente hay muchos tipos de impresoras y diferentes formas de manejarlas, pero básicamente necesitaremos un software de corte o de capas que nos transforme el objeto que tenemos para imprimir, en una serie de instrucciones que entienda la máquina. Hay muchos programas propietarios y propios de cada fabricante de impresoras 3D, pero hay otros abiertos y muy conocidos como Slic3r, Cura o Repetier. Esta parte te puede haber liado algo, pero normalmente el fabricante se encargará de darte todo el software e instrucciones para que configures esto correctamente.
Tiendas de diseños 3D
Si quieres hacer alguna prueba o simplemente no quieres esperar a aprender a diseñar algo en 3D, te dejo algunas tiendas en las que podrás descargar objetos listos para imprimir:
- Thingiverse, es la tienda de objetos 3D por excelencia, además gestionada por la empresa que más ha invertido e investigado en el mundo de la impresión 3D doméstica, MakerBot Industries.
- Shapeways, muchos diseños y con mucha imaginación.
- TurboSquid, modelos 3D muy profesionales, quizás no para imprimir en tu casa, pero alguna idea podrás sacar de ahí.
- GrabCAD, un estilo a la anterior con otros tantos de diseños disponibles.
¿Qué materiales usan?
De forma general podemos decir que una impresora 3D lo que imprime es plástico, pero ya verás que tiene sus pequeños matices según el material que use:
- PLA o ácido poliláctico, es el más usado y más socorrido ya que no necesitará que tu impresora tenga una base caliente para evitar que se fusione con ella. Esto hace que se simplifique mucho el diseño y uso de una impresora y su precio baje algo. Otro detalle que lo hace el preferido de los fabricantes es que se puede usar sin miedo a intoxicación en espacios cerrados o con poca ventilación y que es biodegradable. Se obtiene del almidón del maíz y puede ser usado sin miedo para recipientes de comida. La textura de lo impreso no queda tan suave pero si con más brillo.
- ABS o acrilonitrilo butadieno estireno, en este caso también es muy usado y aunque no sea biodegradable, es más fuerte que el PLA y tiene algo de resistencia química y a la abrasión. Necesita más calor que el PLA para fundirse por lo que complica algo las máquinas.
- Nylon, es el material más complicado para la impresión 3D ya que tiene muchos problemas a la hora de adherirse a la base y puede coger humedad complicando aún más la labor. Sus ventajas, por otro lado, es su gran resistencia, flexibilidad y transparencia.
- HIPS o poliestileno, es muy parecido al ABS y necesita las mismas temperaturas de fusión. Tiene un uso muy curioso que es usarlo junto con el ABS para imprimir lo que serán huecos ya que el HIPS es soluble en D-Limoneno (un líquido que se saca de los cítricos) y el ABS sólo a la acetona.
- PET o tereftalato de polietileno, es el material más usado para envases como las botellas de agua y demás. Su principal característica es que puede cristalizar y hacerse transparente. Es resistente a impactos y lo mejor es que podemos reciclar nuestras botellas y usarlas con nuestras impresoras de PLA.
- Laywoo, necesita temperaturas parecidas al PLA con la curiosidad de que si aumentamos un poco la temperatura o la bajamos, obtenemos diferentes tonos del color que tenemos. Cuando se enfría tiene una textura como de madera y los cambios de temperatura dejan vetas algo más oscuras.
- Ninjaflex, es un nuevo material muy revolucionario que permite piezas con mucha elasticidad. Tiene la consistencia de una goma elástica y las piezas finales pueden deformarse en gran medida. Su temperatura de uso es como la del PLA.
- Resina UV-cured, este es el material usado para las impresoras SLA, es un líquido fotosensible que se endurece al contacto con una luz potente, normalmente se usa un láser. Con este material se consiguen las mejores resoluciones y acabados muy buenos.
Sin duda con imaginación se pueden hacer combinaciones muy interesantes (si tu máquina te lo permite) para conseguir resultados y objetos espectaculares. Ahora veremos que la mayoría de cosas las podremos imprimir con PLA, que es sin duda el material más usado por su facilidad de manejo y resultados suficientemente buenos.
Comparativa de impresoras 3D
3dison+
De fabricación coreana y con un volumen de impresión bastante competente (225 x 145 x 150 mm), la 3Dison Plus es una muy buena máquina por los aproximadamente 1200€ que cuesta. Tiene 3 hermanos mayores, 3Dison Pro, 3Dison Multi y 3Dison H700, que aumentan de manera exponencial sus capacidades, pero en este caso estaríamos hablando ya de máquinas industriales o para uso estrictamente empresarial.
La 3Dison Plus es capaz de imprimir a una velocidad de 200 mm/s con resolución de 50 micras y se le pueden acoplar hasta 2 extrusores, con lo que podríamos imprimir figuritas bicolor. Tanto el software como el firmware son propietarios, por lo que no estamos ante una de las famosas impresoras 3D Open Source. Tiene un control integrado y es posible imprimir sin conectarla al PC, haciendo uso de su lector de tarjetas SD.
Soporta tanto Windows como Mac y sólo usa como material de impresión el PLA, con lo que su base caliente es una ayuda, pero no necesaria.
Builder
Una máquina holandesa disponible en multitud de versiones, tanto en color rojo como negro, con uno o dos extrusores y en versión de 67 cm de altura de impresión, si, si, esta impresora tiene un hermano mayor que podría imprimir perfectamente una figura de más de medio metro de altura. Tiene un coste de unos 1239€ en su versión más nimia y ésta es capaz de imprimir un volumen de 220 x 210 x 170 mm a unos 200 mm/s en una resolución máxima de 50 micras.
Usa software libre pero su hardware lo mantienen cerrado, tiene control integrado en la propia impresora y puede funcionar de forma independiente usando una tarjeta SD o un pendrive USB. Es capaz de funcionar en Windows, Linux y Mac y usa multitud de materiales para la impresión (PLA, ABS, PVA, XT, Woodfill), evidentemente tiene como opcional el poder usar una base caliente para el correcto uso de alguno de estos materiales.
Afinia H-Series
Fabricación estadounidense (como la gran mayoría, ya lo veremos), con un precio de 1299$ y con un tamaño algo más pequeño, que para experimentar un poco a veces se agradece no tener un tiesto por medio. Su volumen de impresión es de 140 x 140 x 135 mm, con una resolución máxima de 150 micras. En este caso usa software propio y no es abierto, ni en su software, ni en su hardware.
No puede imprimir de forma independiente a un PC y solo es compatible con Windows y Mac, por otro lado es capaz de imprimir tanto ABS como PLA y si que posee una base caliente. Recibió el premio de la revista Make de la mejor impresora 3D en cuanto a facilidad de abrir y empezar a usar, además, viene con multitud de herramientas y accesorios para dar un buen uso a esta impresora, detalle que no tienen otros fabricantes.
ZEUS
Con la ZEUS ya entramos en otra liga, esta impresora 3D fabricada en EEUU tiene la particularidad de que además tiene un escáner y es capaz de enviar a otra impresora o PC, lo que estamos escaneando. Para lo compacta y bien acabada que está, su precio no es desorbitado, 2499$. Por el resto de características no destaca demasiado, pero su conjunto es una muy buena máquina, su volumen de impresión esta en 204 x 153 x 145 mm y una resolución máxima de 80 micras, usa un SO propio, el ZEUS OS y es totalmente cerrada.
En cuanto a su conectividad, decir que tiene control integrado en forma de pantalla táctil y puede funcionar autónomamente recibiendo los diseños ya sean por su propio escáner, por microSD, USB, Ethernet o Wifi. Es compatible con Windows, Mac, Linux, Android e iOS y además tienen una interfaz basada en web. Usa PLA, por lo que no necesita una base caliente para un buen funcionamiento.
AW3D
Otra impresora americana con un montón de versiones distintas (la verdad que demasiadas, se hace un poco lioso entender cómo van), empezando en los 2295$ puedes tener hasta 2 extrusores, 300 x 200 x 300 mm de tamaño de impresión a unos 150 mm/s y de entre 60 y 100 micras de resolución. No usa software abierto y solo dos de sus modelos tienen control integrado en el propio aparato, compatible con Windows y Mac.
Cada versión puede imprimir distintos materiales, pero van desde la que solo trata PLA, hasta la que puede con ABS, Policarbonato y Nylon con su correspondiente base caliente. Parece buena máquina, pero sólo bucear entre sus versiones y configuraciones, además de su elevado precio, te hace dudar.
Arduino Materia 101
Esta es una de las empresas de la que estábamos esperando un movimiento de esta magnitud, por fin la italiana Arduino se ha animado a entrar en este mercado (ya era hora ya que la mayoría de las impresoras 3D del mercado usan sus placas para hacer funcionar la mecánica de las mismas). Aun se conoce muy poco de las especificaciones de esta impresora 3D ya que de momento sólo se ha dejado ver en una de las ferias que organiza Make. Sabemos que constará entre los 600 y 1000$ y que tendrá versiones tanto desmontadas como ya montadas.
Uno de los datos más discutidos ha sido su bajo volumen de impresión comparado con el trasto que es (apenas imprime 140 x 100 x 100 mm), pero mejora mucho la definición que pasa a bajar a unas 25 micras. Como no podía ser de otra manera, usa software abierto y se espera que al igual que hacen con todos sus productos, el hardware también lo sea. Posee un control integrado pero no parece que se le puedan cargar externamente los diseños, así que habrá que tenerla conectada al PC, ya sea Windows, Mac o Linux. Tampoco se han querido complicar demasiado con el material de impresión, así que han decidido usar el tan socorrido PLA y evitar así tener que usar una base caliente.
B9 Creator
Esta es la primera impresora 3D SLA que analizamos (recuerda, la que usa un líquido fotosensible para generar las piezas). Es también de fabricación americana y el precio se dispara bastante (3490$) y más teniendo en cuenta que solo es capaz de imprimir hasta 100 x 75 x 205 mm. No sabemos a la velocidad que imprime ni la resolución que puede alcanzar, pero si sabemos que en las pruebas de Make, era la impresora que mejor resultado final daba a las piezas impresas.
Usa software propietario y no es posible manejarla de forma independiente, aunque es compatible con Windows, Mac y Linux. Usa Resina UV-cured, que es algo más cara comparativamente hablando que el plástico de las impresoras de inyección. Bajo mi punto de vista, esta impresora tiene un punto de curiosidad, pero viendo las prestaciones y su precio, creo que el resto van por buen camino usando el plástico como materia prima.
Prusa i3 Hephestos
Por fin llegamos a una de las nuestras, fabricación 100% española. La Prusa i3 Hephestos es prima hermana de muchas otras que derivan del conocido proyecto de impresoras de hardware libre RepRap. Su calidad/precio es de lo mejor del mercado, 499,9€ en un completo kit para montar. Tiene un volumen de impresión de 220 x 220 x 180 mm y una velocidad máxima de 100 mm/s con resolución de hasta 60 micras.
Siguiendo la filosofía de una empresa como bq, no podría ser de otra forma que siendo un proyecto totalmente abierto, con software y hardware libre. Tiene control integrado y acceso por tarjeta SD y USB, funciona con Windows, Mac y Linux y puede usar bobinas de PLA, HIPS o FilaFlex, por lo que no necesitaremos la base caliente, que no la tiene.
No solo por el precio, ni porque la vendemos nosotros, sino porque está hecha en nuestro país y tiene unas especificaciones y acabado increíble, se ha convertido en mi impresora 3D favorita, sin duda.
Witbox
La joya de la corona, el orgullo nacional. La bq Witbox es una obra de la mejor ingeniería, fabricada en Navarra y con detalles y especificaciones que dejan al resto en pañales. Tiene un precio de 1690€ y un volumen de impresión que deja el listón muy alto, 297 x 210 x 200 mm. Es algo más lenta que la competencia (80 mm/s), pero su resolución máxima es también muy buena, unos 60 micras.
Como no podía ser de otra manera también usa software libre y el diseño es abierto, posee lector de tarjetas y conector USB para poder imprimir de manera independiente y al igual que la Hephestos, funciona bajo Windows, Mac y Linux. También usa PLA para la impresión y como no, la vendemos nosotros como distribuidores oficiales de bq que somos.
Cube
Nos volvemos a ir de nuevo a los Estados Unidos para conocer, a mi parecer, el producto con mejor acabado y a lo que tendría que tender el mercado en cuanto a las impresoras 3D domésticas. Sin duda la gran baza de la impresora 3D Cube es su diseño, pero ya veremos que tampoco se queda corta en el resto de prestaciones. Su volumen de impresión es de 152,4 x 152,4 x 152,4 mm (de ahí lo de Cube) y viene directamente con 2 extrusores para poder imprimir en dos colores.
Tiene una resolución máxima de 70 micras y usa un sistema totalmente cerrado con software y hardware propio. En la imagen puedes ver que además tiene un control integrado en la propia máquina en forma de pantalla táctil que le permite la impresión independiente con ayuda de su conexión Wifi o USB. Es compatible con Windows y Mac y tienen planteadas aplicaciones para Android e iOS. Usa PLA en su versión más pequeña para añadir ABS además de algunas características mejoradas en su versión Cube Pro. Ahí donde la ves “sólo” cuesta 989€.
Bukito
Seguimos en USA para irnos al otro extremo en diseño, se nota que esta impresora es totalmente DIY (que no le quita mérito ni calidad), ya que está sólo disponible en kits para montar y con un precio de 899$. Su volumen de impresión es de 140 x 150 x 125 mm con una velocidad de 100 mm/s y con un sólo extrusor, aunque tiene un hermano mayor, el Bukobot 8, que además de ser más grande e imprimir el doble de rápido, tiene la posibilidad de tener hasta dos extrusores.
Usa software y hardware libre y puede trabajar de forma independiente por SD una vez haya sido iniciada desde el PC. Funciona bajo Windows Mac y Linux y puede imprimir con PLA, Nylon y Laywood.
DeltaMaker
Con esta impresora nos topamos con un diseño algo distinto llamado Delta, que consiste en tres columnas que son las encargadas de regular tanto la altura como el punto X, Y en el que debe estar posicionado el extrusor en cada momento. A parte del diseño algo extraño no sé realmente qué ventajas puede tener a un diseño común (y si te fijas tampoco se ha estandarizado mucho), pero seguro que no es el precio ya que está en 2399$.
Se vende ya montada, pudiendo imprimir hasta un volumen de 240 x 240 x 260 mm, con un único extrusor y con una resolución máxima de 100 micras. Hace uso de software libre pero el diseño no está documentado como tal. No tiene controles integrados en la propia máquina pero puede imprimir de forma independiente a través de Wifi y Ethernet. Usa sólo PLA para la impresión, por lo que no necesita una base caliente.
Idea Builder
Otra de las grandes empresas que ha saltado a este negocio hace poco, Dremel, se mete en el mundo de la impresión 3D con su impresora Idea Builder. Solo con que se haya decidido a entrar es un paso para afianzar esta tecnología y asegurarse de que vamos a tener productos de buena calidad y fiables como son las herramientas de este fabricante.
Ha entrado fuerte en el mercado, con un precio de 999$ y capaz de imprimir hasta 228,5 x 150 x 140 mm, apostando por la configuración de un solo extrusor y con resolución máxima de 100 micras. Como no podía ser de otra forma, usa software propio y tiene pinta de que quieren integrarlo con una base de datos online que hagan sus propios usuarios de diseños para compartir, un acierto si es usado ampliamente.
Tiene pantalla táctil y puede imprimir de manera independiente por tarjeta SD o USB, siendo compatible con Windows, Mac y Linux. Aquí también han ido a lo más coherente y sencillo, usar PLA para no añadir una base caliente al aparato.
Felix 3.0
Otra gran impresora DIY como puede apreciarse en su estética. Esta viene de Holanda con un precio base de 1099€ en un kit para montarla, aunque pagando un poco más nos la mandan ya lista. Su volumen de impresión es 255 x 205 x 235 mm y puede tener hasta 2 extrusores imprimiendo a una resolución de 50 micras.
Usa software libre pero el hardware no está documentado, puede imprimir de forma independiente a través de su lector de tarjetas SD y tiene la posibilidad de añadir un LCD con control integrado. Funciona bajo Windows, Mac y Linux y puede imprimir PLA, ABS y Nylon, por lo que necesita una base caliente.
Form 1+
Nos volvemos a encontrar con una impresora que hace uso de la tecnología SLA y la Resina UV-cured. Aunque en un principio no podamos ver la ventaja de pagar 2799€ por ella aún teniendo un volumen de impresión de unos escasos 125 x 125 x 165 mm, hay que decir que su resolución máxima es lo que catapulta a esta tecnología con respecto a la inyección de plástico ya que puede alcanzar las 10 micras de alto de capa.
Usa software totalmente propio (PreForm) y es de diseño cerrado. Necesita el PC conectado para empezar a imprimir, pero una vez andando se puede desconectar. Es compatible con Windows y Mac.
Creatr
Estamos de nuevo en Holanda para encontrarnos con una impresora 3D y sus hermanas mayores que tiene muy buena pinta. Tiene un precio de unos 1500€ y un volumen de impresión de 230 x 270 x 200 mm, una velocidad de 60 mm/s, la posibilidad de añadir un segundo extrusor para imprimir a doble color y una resolución máxima de 50 micras. Como comentaba, tiene versiones superiores que mejoran estas características, llegando a costar la más cara unos 8500€, siendo evidentemente para uso industrial.
Hace uso de un software propio basado en el de código abierto Repetier. Funciona sobre Windows, Mac y Linux e imprime con PLA, ABS, PVA, Nylon, Brick e Hybrid, por lo que necesita una base caliente.
KITTAZ
Esta impresora está ideada de manera que te la puedas mejorar con diferentes kits de ampliación, teniendo su modelo base un precio de 1595$. Su volumen de impresión es muy elevado, 298 x 275 x 250 mm, al igual que su velocidad de impresión, 200 mm/s.
Tiene una resolución máxima de 75 micras y es de software y hardware libre. No tiene control integrado, pero se le puede añadir como extra y es compatible con Windows, Mac y Linux. Por defecto puede imprimir en ABS, PLA, PVA, HIPS y Laywood, por lo que necesita y tiene una base caliente.
MakerBot Replicator
Se les considera (y con razón) los padres de la impresión 3D doméstica. Si no fueron los primeros en adentrarse en este mundo, poco les faltó, pero seguro que si que son los que más han invertido en difundir y potenciar este nuevo nicho en auge. La Replicator ha sido siempre su abanderada (esta es ya la versión 5), pero ahora tienen otros modelos como pueden ser la Replicator Mini, para bolsillos más exigentes y la Replicator Z18, un todo terreno para ambientes empresariales.
Su gama de precios van desde los 1375$ de la Mini, pasando por los 2899$ de la que encabeza esta sección y los 6499$ de la Z18. En el caso particular de la Replicator, es capaz de imprimir hasta los 252 x 199 x 150 mm de volumen con una resolución de hasta 100 micras. Aunque parezca raro, ya que empezaron siendo totalmente abiertos, en la actualidad tanto el diseño como el software usado por las Replicator es cerrado y propietario.
Tienen la opción de la impresión de forma independiente usando conexión Wifi, Ethernet o USB y es compatible con Windows, Mac y Linux. En este caso también han ido a lo práctico y solo trata PLA.
MBot Cube
Ya estábamos tardando en irnos a China, en este caso para encontrarnos una impresora 3D que a simple vista se ve que es para amantes del DIY. La podemos obtener con un precio base de 669$ en forma de kit de montaje y tiene una versión más profesional llamada MBot Grid II. La versión base tiene 200 x 200 x 200 mm de volumen de impresión y puede imprimir a una velocidad de 40 mm/s con una resolución máxima de 100 micras.
Usa software libre como la mayoría de impresoras de este tipo y como podemos ver en la imagen tiene control integrado para poder usarla de forma independiente a través de su lector de tarjetas SD o por USB. Es compatible con Windows, Mac y Linux y puede usar PLA y ABS para la impresión, aunque extrañamente parece que no tiene una base caliente.
Peachy Printer
Realmente estaba dudando si poner o no esta impresora ya que como se puede ver en la imagen, está en fase de creación y diseño aún. Me he decidido finalmente porque salió de un proyecto de Kickstarter en el que consiguió recaudar 13 veces el precio que necesitaban para empezar. Es una impresora canadiense con tecnología SLA en la que su mejor baza es su precio, ya que va a rondar los 100$ canadienses (unos 70€ al cambio). Con este precio como para resistirse.
Poco más se sabe de ella, todo son especificaciones aproximadas, como su volumen de impresión, que rondará los 76 x 76 x 406 mm, o su resolución, unas 200 micras. Lógicamente usará como material de impresión la Resina UV-cured.
Phoenix
Esta impresora es otra de esas con el esqueleto al aire, para los amantes de ver cómo funciona todo. Viene de USA y tiene un precio base de 374$ disponible en kit o ya montada, tiene un volumen de impresión de 250 x 215 x 200 mm y la posibilidad de ponerle un segundo extrusor. Su resolución máxima es de 100 micras y hace uso de software libre que podrá andar sobre Windows, Mac, Linux, Android e iOS. Tiene base caliente, por lo que podremos imprimir con PLA, ABS, HIPS y Nylon.
Buccaneer
Otra impresora que me llama la atención, tanto por su diseño a la altura de un buen producto final, como por su precio que no es demasiado alarmista, unos 397$. Parece pequeña pero es capaz de imprimir hasta los 145 x 125 x 150 mm de volumen con una resolución máxima de 50 micras.
Usa software propietario y al parecer está muy bien preparada para los últimos tiempos ya que tiene totalmente integrados todos los sistemas, funciona en Windows, Mac, Linux, Android e iOS. Tiene Wifi y Ethernet, por lo que se le presupone que podrá funcionar de manera autónoma aunque no tenga controles integrados. Usa el milagroso PLA para imprimir.
UP!
Muy muy parecida a la Afina H-Series que vimos al principio del artículo, pero sólo en su versión más potente que es la de la imagen, ya que la versión más pequeña no tiene nada que ver visualmente hablando. Cuesta 899$, viene también de una empresa estadounidense (ya te dije que éstos tienen el monopolio de momento) y tiene un volumen de impresión de 120 x 120 x 120 mm en su versión Mini y algo más en la Plus (la de la imagen).
Tiene un solo extrusor y una resolución máxima de 200 micras, usa software propio y puede imprimir de forma independiente si antes le mandamos el diseño desde el PC. Funciona bajo Windows y Mac y usa PLA y ABS como materia prima de impresión, por lo que tiene base caliente.
Printrbot
Esta impresora fue la que siempre tuve en el punto de mira para que fuera mi primera compra, primero por su estética totalmente DIY y en segundo lugar por su precio, 349$ disponible tanto en kit para montar como ya montada. Es muy pequeñita y compacta, con un volumen de 100 x 100 x 100 mm y una velocidad de impresión de 60 mm/s. Es la máquina perfecta para hacer tus pequeñas pruebas y poder desarmarla y mejorarla sin miedo a llevarte por delante varios miles de €.
Tampoco destaca en nada más, tiene una resolución de unas 100 micras y es totalmente abierta, tanto en software como en hardware. Trabaja bajo Windows, Mac y Linux y es capaz de imprimir PLA (y ABS en su versión ampliada) sin necesidad de estar conectada al PC, simplemente siendo iniciada desde él.
OneUp
Este impresora ha sido todo un descubrimiento de hace muy poquito tiempo. Viene de EEUU y tiene un precio base de 199$ en su versión de kit para montar, es muy pequeña, apenas un volumen de impresión de 100 x 100 x 125 mm. Por supuesto tiene versiones superiores con mayores dimensiones y precios, pero se agradece que la tendencia sea buscar este tipo de impresoras para ampliar el público al que pueden ir dirigidas.
Imprime a una velocidad de 100 mm/s (las versiones grandes imprimen a 500 mm/s, todo un récord aunque habría que comprobarlo), con un sólo extrusor y unas 50 micras de resolución esta pequeña impresora se sale de la media, para bien. Usa software y hardware libre y evidentemente por su tamaño y precio, no tiene control integrado y no puede imprimir de forma independiente. Funciona sobre Windows, Mac y Linux y sólo puede con el PLA.
R1
Con un precio de 799$ y con el modelo R2 a punto de salir, esta impresora 3D no llama del todo la atención por sus especificaciones. Se vende ya montada y tiene un volumen de impresión de 254 x 228,6 x 203,2 mm, la capacidad de montar un solo extrusor y una resolución máxima de 100 micras. Usa software libre y aunque no tiene control integrado, puede funcionar de forma autónoma por medio de su lector de tarjetas SD.
Funciona sobre Windows, Mac y Linux y gracias a su base caliente puede imprimir con ABS, PLA, T-Glase, Laywood e HIPS.
Rostock MAX
Nos volvemos a encontrar un diseño Delta en una impresora 3D, no sabemos exactamente las ventajas con respecto al método común, pero vemos que hay alternativas también aquí. Esta tiene un precio base de 999$ y es una derivada de su anterior modelo, la Orion Delta, que curiosamente sigue en venta a un precio superior y con características claramente inferiores a esta.
Se venden en kits para montarte y en este caso tenemos un volumen de impresión de 280 mm de diámetro (fíjate que en el caso de las Delta, su base es redonda) con 370 mm de alto. Su velocidad de impresión es de 300 mm/s con un extrusor y una resolución máxima de 50 micras.
Como vemos en la imagen, tiene un LCD con control integrado y puede funcionar de forma autónoma. Imprime ABS y PLA, por lo que su base es caliente.
Kiwi-3D
Nos vamos de visita a nuestra cercana Italia para encontrarnos con esta máquina de reducido tamaño. La Kiwi-3D tiene un precio en forma de kit de 570€ e imprime un volumen de 140 x 100 x 100 mm, característica superada ampliamente por sus hermanos mayores, la Next Generation (250 x 200 x 200 mm) y la Next Generation XXL (700 x 200 x 200 mm). Puede imprimir con 100 micras de resolución con el único extrusor que tiene.
Hace uso de software libre y puede funcionar de forma independiente gracias a su lector de tarjetas. Soporta Windows, Mac y Linux y usa PLA como material de impresión.
Press
Las Solidoodle son una familia de impresoras 3D norteamericanas que empiezan con la más pequeña, la Press, en un precio de 449$ en venta totalmente compacta lista para usar. Tiene un volumen de impresión considerablemente bueno, de unos 203 x 203 x 203 mm e imprime a 100 micras de resolución con su único extrusor (su hermano mayor Workbench viene con dos extrusores).
Usa software propietario, el SoliPrint y como puedes ver en la foto, no tiene control integrado. Funciona en Windows, Mac y Linux y puede usar además de PLA, ABS para imprimir.
SpiderBot
Poca información hemos podido encontrar de esta impresora francesa, incluso en su página web oficial no dan todos los datos. Lo que sabemos es que su primera versión funcional cuesta 1275€, que como se puede observar es un diseño Delta (me estoy fijando que los Delta son siempre carísimos para las especificaciones que tienen) y que tiene un volumen de impresión de 180 mm de diámetro y 180 mm de altura.
Su resolución de capas es de 150 micras e imprime ABS y PLA por lo que intuimos que tendrá base caliente.
Litto
Esta impresora canadiense empieza en un precio de 999$ en su versión más pequeña (Litto) y en forma de kit de montaje DIY. Tiene un volumen de impresión de 135 x 120 x 175 mm e imprime a una resolución de 100 micras con su único extrusor.
Usa un software propio llamado Tinkerine Suite que al parecer es open source. La Litto no tiene controles integrados, pero tanto la Ditto+ como la DittoPro lo tienen junto con un lector de tarjetas para poder imprimir de manera independiente.
Son compatibles con Windows y Mac y han querido no complicar la cosa usando sólo PLA y así evitar la base caliente.
Series 1
He dudado si incluir también esta impresora ya que está tirando más a las de niveles industriales que a lo que hemos visto por aquí. A parte de su gran tamaño (un volumen de impresión de 305 x 305 x 305 mm), tiene un coste de 2749$, vamos que no es para tenerla en casa.
Su velocidad de impresión es bastante cortita, unos 50 mm/s, su resolución máxima es de 50 micras y usa software libre. Ni idea de donde sacan los casi 3 mil dólares que cuesta…
Es open hardware con algunas restricciones comerciales. No tiene control integrado y puede imprimir de forma independiente usando su Wifi, Ethernet o USB. Funciona sobre Windows, Mac y Linux y sólo usa PLA.
Ultimaker
Junto con las Replicator de Make, éstas son las impresoras 3D más famosas del escenario actual y de los últimos años, y otra de las compañías que más ha divulgado esta tecnología, prueba de ello es que es una impresora totalmente abierta. Son holandeses y su kit más barato cuesta unos 995€, tiene un volumen de impresión de 210 x 210 x 205 mm e imprime bastante rápido, unos 300 mm/s.
Tiene un solo extrusor pero es capaz de imprimir a una resolución de apenas 20 micras usando como decía software y hardware libre. Puede imprimir de forma independiente gracias a su control integrado y funciona sobre todo, Windows, Mac y Linux. Tiene opciones de ampliación con base caliente, así que puede imprimir ABS y PLA sin problemas.
Conclusión
Hablando fríamente y con la cabeza centrada, si crees que vas a imprimir un par de cosillas y luego ya no vas a saber qué hacer con ella, no te compres ninguna impresora 3D, primero porque normalmente son un tiesto y si no la vas a utilizar mucho, va a ser un adorno de mucho bulto, y segundo porque como habrás comprobado los precios no son para todo el mundo.
He intentado tener en cuenta un montón de factores interesantes y que creo importantes, pero sin haberlas tenido físicamente hay detalles que se me pueden haber escapado, no sé, se me ocurre la calidad de los materiales de fabricación, si se suelen quedar atascadas con frecuencia, la dificultad de montaje si vienen en kits, etc… son cosas que no puedo saber desde la distancia y que son también muy importantes.
Si me preguntas cuál de éstas me compraría para mi, sin duda te diría que la Prusa i3 Hephestos por varios motivos:
- Me gusta cacharrear y aprender desde la base todo lo que pueda, por lo que comprar una impresora 3D ya montada no es una opción que me plantee.
- Su precio. Si te has leído este artículo entero, te habrás dado cuenta que aunque las características de las impresoras no varíen mucho, si que lo hacen sus precios, y en este caso creo que es la mejor opción calidad/precio.
- Producto nacional. Está fabricada en España y dejando el tema del orgullo nacional a parte, facilita muchas cosas, no tendrás sustos en la aduana, si te falla algo tienes el soporte en tu idioma, todos los manuales están en español, gastos de envío más reducidos…
Sé que el hecho de que la vendamos nosotros no nos hace muy imparciales, pero seguramente hayas llegado a la misma conclusión tu mismo durante la lectura de esta comparativa. No quiero cerrar este artículo sin mencionar que habíamos pedido a bq directamente un par de impresoras para poder hacer mejor la comparativa de sus máquinas y quizás un análisis mucho más exhaustivo, pero nos lo han negado (y eso que somos sus distribuidores oficiales).
Sin más terminar diciendo que como en todo, se me puede haber olvidado alguna impresora 3D doméstica que creas que debería estar aquí, así que si eres tan amable, déjala en los comentarios y la incluiré.