Complejo de superioridad

¿Qué es el complejo de superioridad? Es el conjunto de valoraciones reales o imaginarias que hace suponer a una persona que es superior a los demás y por ello puede actuar con desprecio, arrogancia o indiferencia.

Normalmente se considera que el complejo de superioridad busca esconder un complejo de inferioridad existente:

Complejo de superioridad

Una persona que siente vergüenza por sus debilidades, tratará de esconderlas y jugar un papel sobreactuado en la dirección opuesta. Por ejemplo hay personas que están en una situación financiera mala, pero les duele tanto imaginar que sus amigos y compañeros de trabajo lo sepan que actúan como si fuesen millonarios, con vestimenta caras y buenos autos, aunque estén en un mar de deudas, su único afán es aparentar ser superior para cubrir una carencia.

El complejo de superioridad se evidencia en la forma en que las personas tratan a los demás:

Los individuos equilibrados, con valores positivos bien afianzados y una alta responsabilidad personal tratan a todas las personas por igual, no hacen distinciones pensando en títulos, posición económica, fama, rangos o intereses personales.

La gente con complejo de superioridad tratará con indiferencia, desprecio, arrogancia, irrespetuosa, etc. A los demás. Es fácil detectar a una persona que posee este complejo, es posible que busque ser el centro de atención en un lugar y para ello utilice diferentes tácticas: hablar en voz alta de sus enormes logros personales, vestirse de forma extravagante para que los demás le miren, sobreactuar, etc.

El complejo de superioridad puede provocar que las personas se alejen de las relaciones sociales:

Las personas que se sienten superior a los demás les puede resultar difícil goza de BUENAS RELACIONES SOCIALES, porque consideran que las personas no están a su altura y que para llevarse con “gente inferior” es mejor estar solo.

Poseer el complejo de superioridad es un problema psicológico que necesita ser tratado, porque sin duda que puede traer consecuencias negativas a la vida de una persona. Gran parte del éxito depende de la capacidad que tengas de establecer buenas relaciones con las personas, si te comportas de forma arrogante puedes perder muchas oportunidades y en los casos extremos las puertas se te cerrarán por todos lados.

El complejo de superioridad versus el ejercicio de la autoridad:

Aprender a ejercer la autoridad no tiene ninguna relación con el complejo de superioridad. Por ejemplo si eres el jefe del departamento de una empresa tienes que aprender a ejercer tu autoridad, por supuesto que es fundamental el diálogo, planificación, respeto, cierto nivel de autonomía y decisión por parte de los empleados, etc. Pero si al inicio dejas que las personas actúen a su libre albedrío, incluso cometiendo grandes errores y no haces nada para corregirlo, simplemente perderás el control.

Un buen líder se destaca por ejercer la autoridad con inteligencia, donde es capaz de motivar a su equipo, busca resaltar las cosas buenas y explotar las capacidades de las personas. El líder usa la motivación para dar un voto de confianza a su personal y decir: “yo confío en ustedes, harán un excelente trabajo”, “te elegí a ti, porque este cargo necesita una persona extraordinaria”, etc.

El líder ejerce una presión y autoridad basado en la exigencia y compromiso con los resultados, él mismo está tan enfocado que mueve una ENERGÍA MISTERIOSA para lograr que los demás se ajusten a sus expectativas.

El complejo de superioridad es diferente a tener una opinión favorable de sí mismo:

Para triunfar en cualquier objetivo que te propongas necesitas tener una opinión favorable de ti mismo, porque de lo contrario las puertas del fracaso te estarán esperando.

Imagina que quieres un ascenso en tu empresa, para ello deberás demostrar: responsabilidad, iniciativa, lealtad, liderazgo, eficiencia, etc. Para alcanzar esa posición es obligatorio la opinión favorable de ti mismo, donde puedas utilizar afirmaciones poderosas para decirte “yo soy un extraordinario empleado”, “yo soy el vendedor estrella de la empresa”, “yo soy un gran líder”, etc. Estas ideas son el fundamento para tu superación personal.

Pretender ser mejor o ser consciente de serlo tampoco implica complejo de superioridad:

Si durante 5 años consecutivos has sido el vendedor estrella de tu compañía, hay un hecho contundente “eres el mejor vendedor” y debes sentirte alegre por serlo. Entonces ser consciente que se tiene un mejor servicio que la competencia, la calidad de un producto es más alta o que tienes el perfil idóneo para desempeñar un puesto no debe confundirse con el complejo de superioridad.

Cuando hay buenos resultados se debe ser humilde y seguir trabajando para que cada día pueda mejorarse. El complejo de superioridad sería comportarse de manera soberbia y ver de menos a otros que tienen resultados más modestos.

Aunque sepas que eres bueno en algo, lo mejor es que otros hablen de ti:

Nadie puede obtener excelentes resultados sin ser consciente de ello. Por ejemplo un jugador estrella de un equipo de fútbol ¿cómo no va a ser consciente que es un buen jugador? Es obvio que sí es consciente de ello. Solo que usa la prudencia y la humildad y deja que los demás hagan sus opiniones, mientas él se concentra en mantener su autoconfianza y mejorar cada día.

Alejarte de las personas y ambientes que no te convienen no es complejo de superioridad:

Este es otro aspecto que muchas personas no comprenden, por ejemplo alguien pertenece a un grupo de amigos que han compartido por años en fiestas y mucha diversión, de pronto esa persona se da cuenta que en buena medida ha perdido gran parte de su tiempo y juventud, entonces comienza a concentrarse en sus sueños personales y va alejándose de sus amigos.

Cuando el nivel de expectativas en las mentes de las personas es marcadamente diferente, entonces la separación de las vidas ocurre. Por ejemplo tus antiguos amigos solo están interesados en ir de fiesta todos los fines de semana, pero tú estás enfocado en construir un negocio exitoso, simplemente ya no te interesa la vida anterior, quieres nuevas experiencias.

Esa persona que ha decidido un cambio de vida, ya no quiere escuchar a personas negativas que solo pasan quejándose y no hacen nada por cambiar, entonces se va alejando no porque considere que sus antiguos amigos sean menos, simplemente los deseos son diferentes.

Cuando una persona ha realizado un trabajo fuerte sobre sí mismo y puede llegar al éxito, entonces una consecuencia normal es que todo cambie, el ambiente, las personas, los gustos, etc. Y eso en ningún momento implica complejo de superioridad, pero quienes no han trabajo para construir un mejor futuro lo verán de esa forma.

Tú nunca debes renunciar a tus sueños solo por la opinión que otros puedan tener de ti. Estás en el pleno derecho de vivir un estilo de vida abundante en todo y alcanzar la autorrealización.

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napoleon

Escritor, publicista, experto en Coaching y asesoramiento empresarial, analista de proyectos, estudioso de los factores determinantes para el éxito personal y organizacional.

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