A propósito de la puesta en marcha de la reforma laboral, el pasado 1 de abril, cada vez se hace más necesario dar visibilidad a la oferta que la organización tiene para sus colaboradores.
¿Qué nos hace permanecer en un lugar de trabajo?, ¿qué es lo que más valoramos de nuestra empresa?, ¿saben los empleados claramente cuál es la recompensa total que la organización les ofrece?Cuando hablamos de propuesta u oferta de valor al empleado, hablamos de todos aquellos aspectos que son valorados por un trabajador y que genera compromiso en él.
Esta oferta no se centra sólo en beneficios, aunque son claves, sino que abarca los distintos aspectos con que una empresa u organización puede generar engagement. Entre ellos tenemos:
Beneficios y Compensaciones: estas consideran remuneraciones básicas, remuneraciones por desempeño, todo tipo de beneficio, participación en utilidades, bonos, etc.
Ambiente Laboral: el clima laboral es un factor clave hoy - sobre todo para las nuevas generaciones- de valoración empresarial. Un mejor clima es una diferenciación entre una y otra organización y de acuerdo a ello también es un elemento de oferta de valor.
Calidad de Vida: todas aquellas acciones que contribuyen a que un colaborador se sienta más a gusto en su trabajo, equilibrando además su vida personal. Considera permisos especiales, flexibilidad horaria (desfase de ingreso y salida), trabajo remoto, entre otros.
Posibilidades de Desarrollo: aquí la capacitación, programas de talento, pasantías, becas de estudio, movilidad interna, son claves. Los colaboradores valoran cada vez más la posibilidad de potenciar su carrera y es parte de la oferta de una organización.
Reconocimiento: este es otro factor que genera compromiso interno y que se considera parte de la oferta de valor. Los programas que generan agradecimiento o retribución a los trabajadores son portadores de cultura y contribuyen a que cada uno se siente considerado.
Identidad: la identidad, propósito y valores organizacionales hoy también son parte de la propuesta de valor, porque -sobre todo los millennials- las personas quieren trabajar en organizaciones consecuentes, que compartan sus propios valores y que tengan un objetivo superior, más allá de su crecimiento económico.
Marca e Imagen Externa: la posición de la empresa en el mercado y la valoración de su marca son sin duda una oferta al trabajador. Esto se incrementa hoy con la reputación de marca, a través de las acciones de empresa como ciudadano responsable, que las nuevas generaciones cada vez valoran más al momento de permanecer o postular a una organización.
Comunicar la Oferta de ValorEn cada ámbito mencionado, la organización tiene algo que entregar y proponer. Sin embargo, en la mayoría de los casos no hay conciencia de esta propuesta o, si lo hay, no está definida o estructurada y mucho menos está comunicada.
Si no damos visibilidad a esta recompensa total, es muy difícil que un colaborador se comprometa con su empleador o que tome decisiones informadas antes de optar, por ejemplo, por otro trabajo.
Es necesario levantar qué es lo que más valora un colaborador de su empresa, construir una propuesta clara y estructurada y, por supuesto, comunicarla. No olvidemos que lo que no se comunica no existe, es decir, podemos ser la mejor empresa para trabajar, pero si mis colaboradores no se enteran esa "verdad" no existe.
Ante los cambios en la legislación laboral, generar la visibilidad de estos aspectos es clave para que los trabajadores conozcan y comprendan cuál es la propuesta existente en su empresa y cuáles son los beneficios tangibles que ésta ofrece.
Cambios en la Reforma laboralDesde el 1 de abril, la legislación laboral sufrió una serie de cambios y las empresas están mirando cómo éstos impactan en sus relaciones laborales.
Cambios como el no reemplazo en huelga, la incorporación del piso mínimo en la negociación, definición de servicios mínimos, las opciones de descuelgue en huelga, prácticas antisindicales y desleales de ambas partes, son algunos de los cambios que estarán presentes en las negociaciones laborales que se realicen desde abril en adelante.
Los mecanismos de solución de controversias, que se pueden acordar entre el sindicato y el empleador, es otro de los aspectos nuevos y que fomenta la comunicación fluida entre los estamentos para no tener que llegar a Tribunales de Justicia o a la Inspección del Trabajo.
Establecer un plan de comunicación con el sindicato y sus representantes es clave, al igual que generar un plan que informe a la organización los procesos que se están viviendo durante la negociación. No olvidemos, además, la necesidad de generar un plan en caso de crisis.
Fuente: https://susanacaceres.com/2017/05/31/comunicando-la-propuesta-de-valor-al-empleado/