Comunista, tú a mi no me representas

Habría que preguntarse si lo que nos toman es por tontos, o si tenemos mucha suerte o si los protagonistas hablan más de la cuenta y, sobre todo, gratuitamente. Últimamente no veo más que a perroflautas, con un más que dudoso gusto estético, aparecer por tertulias de radio, televisión e incluso algún que otro vídeo de Youtube hablando en nombre de pomposas asociaciones, y sobre todo diciendo que representa al pueblo, o a los ciudadanos, vaya que me representarían a mi también.

Estos nuevos Mesías que aparecen, nombrados no se sabe muy bien por quién, y que además suelen estar recién salidos del cascarón no se a quien representarán, pero desde luego a mi no. Aquí parece que en primer lugar tienen que venir tipos, con treinta años recién cumplidos, a decirnos a los que ya empezamos a peinar canas lo tontos que somos y lo mucho que nos van a enseñar ellos porque ellos saben mucho de todo. Y se quedan tan anchos, en realidad son ellos los que tienen un problema porque lo que en realidad tienen es una adolescencia tardía. Si, esa adolescencia en la que crees que sabes más que nadie, en la que crees que sabes más que tus abuelos o tus padres y en la que cada vez que ellos te daban un consejo cerrabas los ojos con resignación mientras negabas con la cabeza.

Pero no sólo eso, también vienen muy dispuestos a darnos clases de teoría política y a explicarnos como fueron épocas que nosotros si hemos vivido y ellos no, y siempre para decirnos lo equivocados que estábamos. Y dentro de esas clases de teoría política también nos vienen con teorías políticas tan novedosas, modernas, actuales y, sobre todo, desconocidas como por ejemplo el comunismo. Es curioso, el niñato que dice representarme, que no tiene más de treinta años, que normalmente va hecho un marrano, que acaba de salir del cascarón y que lo primero que piensa es que está rodeado de tontos ahora me va a hablar de algo nuevo, me va a hablar de comunismo.

Pues hay veces que ante ciertas cosas no necesitas a ningún niñato que venga a abrir los ojos a nadie porque con lo que uno ha vivido, con lo que uno ve y con lo que uno piensa es suficiente. Quizás si que haya demasiada gente tan sumamente desesperada o aborregada que necesiten que lo hagan por ellos, pero de momento eso a mi no me pasa, y creo que a la mayoría de la gente tampoco.

Yo me represento a mi mismo, pienso por mi mismo y tomo mis propias decisiones. De momento esos niñatos tan estudiados y de carreras tan pomposas, que vienen a tratarnos de tontos, lo que no se dan cuenta es que gracias a todos los que somos más mayores que ellos, y tan tontos, es probable que hayan tenido la oportunidad de estudiar todas esas carreras. Pero de lo que menos se enteran es que ellos pueden hablar en todas partes, tratarnos de tontos y creerse los reyes del universo gracias, sobre todo, a que nunca hemos permitido que nos gobernaran los comunistas.