Una enmienda transaccional acordada entre PSOE, Unidas Podemos y ERC aprobó este jueves que el castellano deje de ser lengua vehicular de la enseñanza y lengua oficial del Estado español.
La medida fue acordada esta tarde en la cuarta y última ponencia de la Ley Celaá que se ha celebrado en el Congreso.
Con una mayoría de 26 votos a favor, 16 en contra y la abstención del PNV. Ha obtenido el respaldo de Bildu y Más País, mientras que el PP, Ciudadanos, UPN y Vox han votado en contra. Estos partidos recurrirán la ley ante el Tribunal Constitucional porque consideran que supone un «atropello» a los derechos fundamentales de los alumnos que atenta contra la libertad educativa.
El texto que ha sido acordado deja en manos de las comunidades autónomas la capacidad de controlar si se enseña en castellano en las escuelas con lengua cooficial
“El Gobierno está entregando la educación a cambio de votos para afianzar sus Presupuestos”, ha expresado Cuca Gamarra, portavoz del Grupo Parlamentario Popular. “Los españoles no merecen pagar ese alto precio para que el presidente siga en la Moncloa”.
“La enmienda me parece gravísima y lo pararemos desde otras instituciones. Con los derechos fundamentales, señores del Gobierno, no se mercadea. Y menos si afectan a menores”, ha señalado Marta Martín, portavoz de Ciudadanos en el Congreso.
Con información de El Mundo