Con la soga al cuello

La horca es el método de ejecución mediante estrangulamiento más utilizado a lo largo de los siglos. Presente ya en la antigüedad y citado en la Biblia, presumiblemente fue de utilización posterior al estrangulamiento mediante las manos, a partir del momento en que los homínidos empezaron a manipular utensilios como los pedernales y las lianas, ampliando así su capacidad agresiva.

La horca

Miles de personas se han suicidado ahorcándose, y también miles han sido las ahorcadas contra su voluntad, como resultado de sentencias judiciales o como consecuencia del furor popular desatado, linchadas a causa de odios y emociones desbocadas.

Colgar es la suspensión de una persona mediante una soga o ligadura alrededor del cuello. El Oxford English Dictionary establece que colgar en este sentido es “específicamente para dar muerte por suspensión por el cuello”, aunque anteriormente también se refería a la crucifixión y la muerte por empalamiento en el que el cuerpo permanecería “colgado”. El ahorcamiento ha sido un método común de pena capital desde la época medieval y es el método de ejecución principal en numerosos países y regiones. El primer relato conocido de ejecución en la horca estaba en La Odissea de Homero.

Existen varios métodos de ahorcamiento en ejecución que instigan la muerte, ya sea por fractura de la columna vertebral o estrangulamiento, siempre buscando la forma ‘más humana’ de aplicar la pena capital.

Caída corta: es un método de ahorcamiento que se realiza colocando al preso condenado en un soporte elevado, como un taburete, escalera, carro u otro vehículo, con la soga alrededor del cuello. A continuación, se retira el soporte, dejando a la persona colgando de la cuerda. Suspendido por el cuello, el peso del cuerpo aprieta la soga alrededor del cuello provocando estrangulamiento y muerte. Esto suele tardar entre 10 y 20 minutos. Antes de 1850, la caída corta era el método estándar de ahorcamiento, y todavía es común en suicidios y ejecuciones extrajudiciales.

Caída estándar:  implica una caída de entre 4 y 6 pies (1,2 y 1,8 m) y entró en uso a partir de 1866, cuando los detalles científicos fueron publicados por un médico irlandés, Samuel Haughton . Su uso se extendió rápidamente a los países de habla inglesa y aquellos donde los sistemas judiciales tenían un origen inglés. Se consideró una mejora humana en la caída corta porque se pretendía que fuera suficiente para romper el cuello de la persona , causando inconsciencia inmediata y muerte cerebral rápida.

Caída larga: éste proceso fue introducido en Gran Bretaña en 1872 por William Marwood como un avance científico sobre la caída estándar. En lugar de que todos cayeran a la misma distancia estándar, se usaron la altura y el peso de la persona para determinar cuánta holgura se proporcionaría en la cuerda para que la distancia fuera suficiente para asegurar que el cuello se rompiera sin llegar a decapitar al condenado. La cuidadosa colocación del ojo o nudo de la soga (de modo que la cabeza fuera echada hacia atrás cuando la cuerda se tensó) contribuyó a romper el cuello.

El trabajo de verdugo

Todos los condenados a la horca habrían preferido que sus verdugos tuviesen los conocimientos básicos para que el ahorcamiento fuese rápido y limpio. No conocer algunos fundamentos básicos como el grosor de la cuerda o la distancia de la caída, podían alargar la agonía en demasía e incluso darse situaciones tan surrealistas como en la que el verdugo se tuviera que agarrarse a los pies del ahorcado y tirar de él u otra en la que la fuerza de la caída lo decapitó.

Teniendo en cuenta todos estos detalles, en 1944 el Departamento de Guerra de los EEUU elaboró un folleto llamado Procedimiento para las ejecuciones militares. En este manual se detalla el tipo de nudo, la construcción del patíbulo con tamaños, grosores y distancias de dicha estructura … y, sobre todo, las tablas de la caída necesaria del cuerpo, dependiendo del peso del condenado.

En la historia de la civilización , diferentes personajes han ejercido el oficio de verdugo. En general era un trabajo que se heredaba de padres a hijos o entre familias. Debido a la mala reputación del oficio, los matrimonios se celebran entre familias de verdugos, llegándose a dar famosas sagas como los “Samson” en Francia.

En líneas generales era un trabajo poco agradecido, pero que alguien debía hacer. Por lo general solían ser gente de clase más bien baja y estaba bien pagado en comparación a los ingresos de la población rasa de la época. En algunos lugares, como en Suecia, el trabajo lo realizaban condenados a muerte cuya sentencia era aplazada al ofrecerse como voluntario.

Su trabajo les llevaba a ser tratados como apestados sociales, a pesar de ser también, en cierta medida, una celebridad porque las ejecuciones tenían mucho de espectáculo público. La capucha que formaba parte de su uniforme estaba parcialmente destinada a salvaguardar su identidad, pese a que muy habitualmente era bien sabida por todos.

Los verdugos eran los protagonistas de todo tipo de supersticiones, pensándose que eran personas que traían malos augurios. De hecho, en muchas zonas era habitual que fuese un trabajo que pasase de padres a hijos, porque nadie aceptaría emplear al vástago de un verdugo en otro gremio. No solo eso, también era relativamente habitual que se concertasen matrimonios entre sus familias de verdugos.

Un ejemplo de este temor se puede ver todavía hoy en el casco antiguo de Barcelona. Como nadie quería tener como vecino al verdugo de la ciudad, finalmente se decidió otorgarle una vivienda en la muralla, entre la capilla de Santa Ágata y la casa Padellás. Está situada en la Plaza del Rey junto al Museo de Historia de Barcelona y todavía hoy se puede visitar.

El apellido Verdugo es común en los países hispanoparlantes, debido a la colonización hispana en el continente americano. Este apellido es castellano-vasco y tiene sus orígenes en Arévalo , provincia de Ávila .

Ahorcamiento para honrar a los Dioses

Hay algunas sugerencias de que los vikingos practicaron el ahorcamiento como sacrificios humanos a Odin , para honrar el propio sacrificio de Odin de ahorcarse del Yggdrasil. En el norte de Europa, se especula ampliamente que los cuerpos de los pantanos de la Edad del Hierro, muchos de los cuales muestran signos de haber sido ahorcados, fueron ejemplos de sacrificios humanos a los dioses.

Mucho antes de la invasión europea en Mesoamérica, el suicidio era considerado un autosacrificio y tenía mucho más valor del que se la ha otorgado. Tan es así que era de personas sumamente valientes quitarse la vida para dársela en sacrificio a sus deidades. A esta inusual práctica se le denominaba Nenamictiliztli.

Para los mayas y nahuas, el suicidio no era más que la forma de imitar a sus dioses, ya que según sus creencias no había mejor manera de honrarlos que haciendo los mismos sacrificios y pruebas que ellos enfrentaron para poder conformar al mundo, empezando por la creación del Sol y la Luna que no es más que el autosacrificio de Nanahuatzin y Tecuciztécatl, quienes se lanzaron al fuego de una hoguera sagrada para conseguir que el Universo se activara dando inicio a la vida.

Ejecuciones mediáticas

En 1692, en Salem, una pequeña aldea de Massachussets, más de 150 personas fueron encarceladas acusadas de brujería, entre ellas niños y niñas. Entre el 19 de junio y el 22 de septiembre fueron condenadas y colgadas en la horca 20 personas.

El 11 de noviembre de 1886 fueron ejecutados en la horca cuatro líderes sindicales. Se les acusaba de la explosión de una bomba que había matado a un policía. Las ejecuciones se llevaron a cabo en medio de grandes protestas y tras un juicio lleno de irregularidades. Su condena fue debida a su liderazgo laboral y a su militancia anarquista, como cabecillas de las reivindicaciones por la jornada laboral de ocho horas, cosa que amenazaba los intereses de industriales y conservadores dentro del gobierno.

En 1946 murieron ahorcados los criminales nazis juzgados en los Juicios de Nuremberg. Dos años más tarde murieron también ahorcados los altos cargos japoneses acusados de crímenes contra la humanidad durante la Segunda Guerra Mundial.

La muerte por ahorcamiento es el principal medio de pena capital en Irán. Es legal para el asesinato, la violación y el tráfico de drogas, a menos que el criminal pague diyya a la familia de la víctima, obteniendo así su perdón. Si el juez que preside considera que el caso está “provocando indignación pública”, puede ordenar que el ahorcamiento se lleve a cabo en público en el lugar donde se cometió el delito, normalmente desde una grúa telescópica móvil que eleva a los condenados por los aires.

El 19 de julio de 2005, dos niños, Mahmoud Asgari y Ayaz Marhoni , de 15 y 17 años respectivamente, que habían sido condenados por la violación de un niño de 13 años, fueron ahorcados en la plaza Edalat de Mashhad , acusados ​​de homosexualidad y violación . El 15 de agosto de 2004, una niña de 16 años, Atefeh Sahaaleh, fue ejecutada por haber cometido actos incompatibles con la castidad.

Los ahorcados y la mandrágora

La mandrágora era muy difícil de encontrar, y se creía que aparecía en cementerios y bajo horcas u árboles en donde alguien fue ahorcado. La leyenda afirmaba que era el semen del ahorcado, producido en la eyaculación post mortem, lo que producía el crecimiento de la mandrágora, y que por eso la planta tenía forma humana.

De ese modo, la mandrágora pasaba a ser vida surgida de la muerte; por eso, en conjunción con su aparición en cementerios, hacía que se la asociara con los ciclos de muerte y renacimiento. Sin embargo se llegó a la conclusión de que eran los nitritos lo que explicaba su aparición tanto en los cementerios como debajo de las horcas, pues junto a la eyaculación post-mortem, había también emisión de orina, siendo ésta muy rica en nitritos.

Fuentes: Amnistía Internacional // Historias de la Historia // Wikiwand  //