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Trabadores y trabajadoras de CVG y Empresas BásicasQuisiéramos comenzar haciendo un llamado, en primer lugar a la búsqueda de la verdad dentro de nosotros, haciéndonos una autocrítica de lo que realmente sucede y lo que creemos o dejamos que nos impongan como la verdad, en segundo lugar hacemos un llamado a la conciencia, y por ultimo hacemos un llamado a que cada uno de nosotros nos revisemos y tengamos la humildad de reconocer que somos capaces de hacer grandes cosas, pero debemos primero reconocer que somos capaces de equivocarnos y por soberbia no reconocerlo. Ilustramos y orientamos estas reflexiones para abordar un tema que nos atañe a todos, como es la situación que se plantea dentro de nuestra institución, la Corporación Venezolana de Guayana (CVG), al igual que en nuestras empresas básicas donde se han planteado una series de rumores, conflictos, enfrentamientos, descréditos hacia las autoridades, y la peor de todas la búsqueda de intereses personales en detrimento de las mayorías. En primer lugar queremos hacer público nuestro rechazo a las situaciones de violencia y caos que se han presentado en los portones de nuestras empresas, situación que lamentablemente en el día de hoy termino arrojando un saldo fatal de una (1) persona fallecida y otras heridas. Esto nos debe llevar a la reflexión y a la acción de forma inmediata, debemos todos en bloque sin distinción de color, raza o credo y mucho menos color político, ejercer nuestro derecho a defender la dignidad y el orgullo de ser hombres y mujeres trabajadores y trabajadores honestos y con el firme compromiso de defender nuestras empresas, en ese sentido nosotros debemos tomar las medidas necesarias para acabar de una vez por todas con las mafias sindicales y sus aliados, debemos recobrar la paz y el sosiego que debe reinar en nuestros sitios de trabajo, debemos ser contundentes y ejercer nuestro rechazo a estos anti-políticos, a estos señores que solo cuidan sus intereses, debemos de una vez por todas entender y concientizarnos que nosotros somos los que ejercemos el poder, nosotros los verdaderamente comprometidos con el país y nuestras empresas que al fin y al cabo son nuestras fuentes de trabajo, tenemos la obligación primero moral, segundo ética y política, porque nos las demandan nuestros hijos que el día de mañana serán los que ocupen los lugares que hoy nosotros ocupamos como trabajadores, si no tomamos decisiones drásticas y concientes del deber que demandan estos tiempos de crisis y sobresaltos políticos, el día de mañana no podremos señalar ni buscar culpables por lo que pase o deje de pasar en nuestras empresas, porque los únicos culpables seremos nosotros mismos, ejerzamos con conciencia patria el poder que se nos da a través del control obrero, dejemos de atacar a las autoridades, a nuestros compañeros, a nosotros mismo, al pueblo a todo el mundo, atacamos para justificar muchas veces nuestros errores y fracasos pongámonos a trabajar y tomemos las riendas de la situación con responsabilidad y dejando a un lado nuestros interese individuales, trabajemos por el bienestar del colectivo socialicemos nuestros conocimientos y experiencias y trabajemos con la firme convicción de sacar del hueco en que nosotros mismos hemos metido a nuestras empresas, seamos honestos y tengamos la valentía de reconocer que muchos de los errores y fallas que hay dentro de las mismas es por nuestra culpa, por no tomar las acciones necesarias, pero de verdad necesarias, no guarinbeando y apoyando a sindicaleros que solo buscan sus beneficios personales, recordemos que tenemos un arma poderosa en nuestras manos como lo es el Control Obrero, por medio del cual ejercemos la verdadera contraloría y el control de nuestras empresas y las autoridades deben someterse a lo que diga la mayoría y trabajar en función del beneficio de todos, en nuestras manos está hacerlo y hacerlo bien. No permitamos que por nuestra falta de acción nos quiten el control del control, en otras palabras tomemos nosotros en nuestras manos la responsabilidad que se nos está asignando y demos el paso al frente, cambiemos de una vez por todas la realidad que actualmente presentan nuestras empresas no sigamos dejando en manos de un grupito, nuestro destino porque seamos claros lo que afecte a nuestras empresas nos afecta a todos de manera directa. Tengamos la conciencia necesaria para desempeñar en forma responsable, clara y precisa a cabalidad el papel que la patria coloca en nuestras manos hagamos historia, es el momento de hacer las cosas bien para que el día de mañana cosechemos los buenos frutos que nos toca sembrar hoy. Con conciencia patria venceremos a la violencia y erradicaremos de nuestras empresas el cáncer de la desidia y desinterés por los asuntos que nos atañen directamente, haremos hoy lo que tengamos que hacer para que la tarea asignada se cumpla a cabalidad. Y a estos politiqueros de oficio y sindicaleros fracasados les decimos que nosotros los trabajadores honestos y comprometidos con este proceso revolucionario, con nuestro país y con nuestras empresas que hoy y siempre rechazamos y rechazaremos esas acciones que van en contra de nosotros y nuestras empresas y que tenemos la firme voluntad y convicción que vamos a sacar nuestras empresas adelante que van a ser ejemplo de honestidad y productividad en función de nosotros y del pueblo de Venezuela quien en definitiva es el verdadero dueño de ellas. Más nunca dejaremos que la sangre de nuestros trabajadores sea derramada en vano, en sus conciencias quedará todo el daño causado no solo a las empresas si no a sus trabajadores y al pueblo de Guayana quien es testigo fiel de sus manipulaciones, desvergüenza, desapego a la solidaridad para con el, por que al dañar nuestras empresas están dañando el patrimonio y futuro del pueblo, pedimos al altísimo nos de la fortaleza y reciedumbre, para no desmayar jamás en nuestra lucha por dignificar y adecentar nuestras empresas, sacando de ellas todo aquel que esté en contra del interés colectivo y del crecimiento de la Nación. Somos hijos de Bolívar, somos luchadores concientes de que en nuestras manos está el futuro de nuestras empresas y de nuestros hijos y jamás los defraudaremos. Abajo la plusvalía arriba el plusvalor, somos obreros pero no pendejos, trabajamos en función de la construcción de empresas rentables al servicio de los interese del colectivo y no de un grupo. Viva el Socialismo y la Conciencia Patria. Trabajadores y trabajadoras de CVG y Empresas Básicas concientes de su deber y del papel que debemos asumir por el rescate de nuestras empresas.