Si algo está mostrando la octava edición olímpica de Filosofía es que aun separados el pensamiento sigue reuniendo. Enorme la participación de nuestros alumnos aragoneses, con un total de veintinueve centros en las cuatro modalidades de Ensayo, Dilema, Fotografía y Vídeo. Enorme la participación de nuestros alumnos en las modalidades escritas, con unas reflexiones que ahondan en las estrechas relaciones que aúnan valores aparentemente incompatibles como la libertad y la seguridad. Y enorme su participación en las modalidades de Fotografía y Vídeo con trabajos audiovisuales que son ya una mirada del mañana que conviene revisar hoy.
Una edición olímpica que, sin duda, se recordará por el nuevo formato adaptado a las nuevas constricciones pero que, paradójicamente, a todos ha desenmascarado: a nosotros, sus profesores, compartiendo la emoción de verles participar; a ellos, nuestros alumnos, afanosos de esa palabra para cerrar la frase o aquella sombra de luz para su composición. Y es que la Olimpiada de Filosofía no es tanto una carrera hacia la victoria como una aventura interior por terrenos compartidos.
¡Bravo por vosotros!, alumnos, por dar sentido a esta empresa colectiva; a nosotros, sus profesores, por animarles y orientarles en su aventura; y a sus coordinadores, sin cuya labor esta actividad no hubiera tenido lugar.
Ahora solo queda desear a nuestros alumnos lo mejor en la fase autonómica, cuyos trabajos en su momento publicaremos. A finales de marzo o principios de abril anunciaremos en el blog de la Olimpiada los nombres de los 10 alumnos finalistas por la modalidad de Ensayo y de los 5 por la modalidad de Dilema, así como el del resto de alumnos finalistas participantes de las modalidades de Fotografía y Vídeo.
¡Hasta pronto!