Revista Opinión
Con los puristas no vamos a ningún lado
Publicado el 11 julio 2017 por James Nightingale @atracoalpuebloCON LOS PURISTAS NO VAMOS A NINGÚN LADO“Son tiempos culminantes. O se van o se quedan, por lo que sepamos empujar del lado correcto de la historia”
EL arresto domiciliario de Leopoldo López no quedó a salvo de los análisis audaces que apresuradamente enaltecen al G2 Cubano y lo elevan cómo los infalibles estrategas de “la movida”. No faltó el purista que además cuestionó la competencia del TSJ o lanzó al pajón a la MUD y a López, por haber “negociado a espaldas del pueblo”. Como escribió el sesudo amigo Ismael en las redes: “Algunos “analistas” de oposición ven la luz al final del túnel ¡y cierran los ojos!”.
No dudo que vivimos en tiempos de engaños, justicia amañada, constituyentes o fiscales embaulados, que han roto nuestra confianza grupal. Pero tenemos que ser sensatos a la hora de conceder mérito a algunos eventos, porque no hacerlo nos mantiene en un perverso estado de inmovilización y pasividad. Que a estas alturas del partido, intelectuales, comunicadores, gente bien preparada, convierta cada retroceso o derrota del gobierno en una “planificada estratagema” antillana, es pulmón para ellos. Mantener un ataque frívolo y apoltronado contra la oposición representada en María Corina, Ramos, López o Guevara, a la que con ligereza califican de ingenua o entreguista, es actitud típica de quienes carecen de dotes políticas de aditamento, y que no se suman a la lucha ciudadana por algún complejo de notabilidad o por el contrario, no tienen real disposición integradora. No es reducir a los teólogos de la conspiración a simples tecladistas. Es más elaborado. Es que para los constructores de especulaciones vacías (puristas), admitir que el gobierno está tambaleante y perdido por la acción de calle y la valentía de la mayoría de los líderes políticos, seria reconocer que están fuera de contexto; que desde un video o un móvil se arriesga poco o nada, o que desde Facebook, Periscope o YouTube, toda autoridad es frágil, relativa y fatua. Por cierto nadie le resta derecho ni espacio a los puristas para incorporarse propositivamente a la lucha por la libertad y la democracia del país. Pero insisten en agarrotarse…
En pocas palabras: hay mucha gente hablando mucha paja, muy irresponsablemente, en momentos muy sensibles y delicados, en los que se perdió la república. Lo hicieron con el tema de la Fiscal General de la República. Toda una parodia de hipótesis conspirativas, donde los puristas jamás consideraron el alcance y trascendencia de este desmarcaje, mismo que ha permitido caracterizar el régimen a nivel internacional y viabilizar acciones que están por verse. Esa actitud destemplada con nosotros mismos, es la que permite decir a gobiernos en el exterior, “cómo colaboramos con Uds., si desde sus propias filas están divididos y denigran de sus líderes”. Es lo que argumentan chavistas divorciados del Madurismo o lo que mantiene a millones de Venezolanos impávidos en sus casas (la mayoría de base popular)…
Desde el 2014 se tejió una fractura en la oposición. Unos tildados de violentos y radicales (López, María Corina, Ledezma), y otros de moderados e institucionales (Capriles, Borges, Falcón). Pero el tiempo demostró que a los bautizados como moderados por los ilustres demoscópicos (ver “Los Datanalíticos de pura paja”/El Universal 28/04/2015), poco les sirvió el manejo maquillado, discursivo, librero, telepolítico, electorero y lírico de la realidad venezolana, al más puro estilo de los panchito mandefuas de Pocaterra. Se aprendió que la calle era lo acertado; lo proporcional a defender la vida y la libertad de la tiranía, del saqueo republicano y del crimen organizado. Hoy los Luis Vicentes se muerden la lengua y ven como el esfuerzo libertario de María Corina, Tintori, Mitzy, Ramos, López, Ledezma, Guevara, Florido; los diputados valientes de la AN y la gente movilizada, son reconocidos por la opinión pública nacional e internacional, y en sus propios sondeos (Ómnibus Datanálisis 2017).
Y llegamos a la realpolitk. Ni el Cap Pérez es un comic, ni la Fiscal es un pote de humo, ni el traslado de López es una orden de Castro a Moreno, que aquél [López] negoció sumisamente. Algo muy serio está pasando y cuando los abedules caen sobre los naranjales, los frutales no reverdecen. La administración Trump hace llamadas. Cuba se repliega. Las lealtades chavistas se contuercen. Una era de latrocinios y desmanes se desmorona irreversiblemente. Las razones a la vista. Un pueblo sufrido que quiere cambio, que tiene hambre y está indignado. Un país que anhela trabajo, seguridad y oportunidades para sus hijos. Tan simple como que nazcan ¡y vivan! Valores que dejaron de existir en Venezuela, un país tradicionalmente sano, rico, pacífico y decente, que en pocos años lo convirtieron en el país más peligroso, desolado y roto del planeta…
El purismo de los letrados no nos llevará a ningún lado. Siembra más incertidumbre y división. Las condiciones están dadas para el desplome de una era. Cada voluntad suma. Es válido sacrificar menos, e incluso permanecer en casa. Pero hacerlo [desde una mecedora] para desdecir torpe e injustamente de aquellos que arriesgan la vida por la libertad de nuestros hijos, es miserable. Son tiempos culminantes. O se van o se quedan, por lo que sepamos estar y empujar del lado correcto de la historia. De lo contrario, la barbarie será irreductible…
Orlando Viera-Blanco @ovierablanco
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