Tercer ensayo, los cuellos van cogiendo "color" y el cuerpo empieza a hacerse a lo que deberán ser, si se nos permite licencia por parte de la madre naturaleza, el caminar durante unas 6 horas, en lo que será nuestra ansiada estación de penitencia.
Ajustamos afianzar un paso firme, un andar seguro así como un control y coordinación de 30 almas que habrán de caminar juntas con la responsabilidad de emocionar y hacer felices a muchas personas que esperan impacientes que llegue el día.
Y después de la "batalla", el sosiego y un poco de convivencia en amistad
Nuestro tercer tiempo tampoco faltó para comentar "las jugadas" de todo lo acontecido en el ensayo
y, cómo no, nuestra tercera foto de familia