Revista Cultura y Ocio
Hoy le tengo que dar las gracias a Dsdmona, del blog El mundo de Dsdmona, por haberse acordado de mí y de Cuéntate la vida cuando llegó a la página 32 de Rosa cándida, publicado por la editorial Punto de lectura y se encontró con esto.
Como se puede ver en la fotografía habían escrito ésa con tilde. La RAE dice sobre las principales novedades de la última edición de la Ortografía de la lengua española de 2010:
Eliminación de la tilde diacrítica en los pronombres demostrativos incluso en casos de posible ambigüedad: Los demostrativos este, ese y aquel, con sus femeninos y plurales, funcionen como pronombres o como determinantes no deben llevar tilde según las reglas generales de acentuación, bien por tratarse de palabras llanas terminadas en vocal o en -s, bien, en el caso de aquel, por ser aguda y acabar en consonante distinta de n o s. Aun así, las reglas ortográficas anteriores prescribían el uso de tilde diacrítica en los pronombres demostrativos para distinguirlos de los determinantes demostrativos, cuando en un mismo enunciado eran posibles ambas interpretaciones y podían producirse casos de ambigüedad. Sin embargo, ese empleo tradicional de la tilde en los pronombres demostrativos no cumple el requisito fundamental que justifica el uso de la tilde diacrítica, que es el de oponer palabras tónicas o acentuadas a palabras átonas o inacentuadas formalmente idénticas, ya que los demostrativos son siempre palabras tónicas en cualquiera de sus funciones. Por eso, a partir de ahora se podrá prescindir de la tilde en estas formas incluso en casos de ambigüedad. La recomendación general es, pues, no tildar nunca estas palabras.
Abrazos literarios para todos.
Como se puede ver en la fotografía habían escrito ésa con tilde. La RAE dice sobre las principales novedades de la última edición de la Ortografía de la lengua española de 2010:
Eliminación de la tilde diacrítica en los pronombres demostrativos incluso en casos de posible ambigüedad: Los demostrativos este, ese y aquel, con sus femeninos y plurales, funcionen como pronombres o como determinantes no deben llevar tilde según las reglas generales de acentuación, bien por tratarse de palabras llanas terminadas en vocal o en -s, bien, en el caso de aquel, por ser aguda y acabar en consonante distinta de n o s. Aun así, las reglas ortográficas anteriores prescribían el uso de tilde diacrítica en los pronombres demostrativos para distinguirlos de los determinantes demostrativos, cuando en un mismo enunciado eran posibles ambas interpretaciones y podían producirse casos de ambigüedad. Sin embargo, ese empleo tradicional de la tilde en los pronombres demostrativos no cumple el requisito fundamental que justifica el uso de la tilde diacrítica, que es el de oponer palabras tónicas o acentuadas a palabras átonas o inacentuadas formalmente idénticas, ya que los demostrativos son siempre palabras tónicas en cualquiera de sus funciones. Por eso, a partir de ahora se podrá prescindir de la tilde en estas formas incluso en casos de ambigüedad. La recomendación general es, pues, no tildar nunca estas palabras.
Abrazos literarios para todos.