Con respecto a las palabras,
sólo algunas nos pertenecen.
Pero no las decimos.
Y mientras callamos,
ninguna palabra que nos pertenece
forma un silencio.
Únicamente el silencio forma el silencio.
Únicamente no decir es gritar.
Hace falta un grito de silencio
que nos pertenezca.
Nora Netto. "Grito Mudo". Tinta china
y polydor sobre hoja canson. 1991.
Será tiempo, entonces, de olvidar el lenguaje
y aprender los silencios en orden alfabético.