Han llegado los días de disfrutar de la piscina, la playa, descansar en el campo a la sombra….
El otro día vi en la piscina a una mamá con sus tres hijos, los dos mayores entraban y salían de la piscina y al pequeño lo estaba amamantando. Podía ver su cara pidiendo que le crecieran dos ojos en la nuca para poder dar a basto. Ella llevaba un carrito dónde tras dar el pecho a su bebé se quedó profundamente dormido pero, ¿cómo podría hacer para no dejar sólo al bebé en una piscina pública y seguir vigilando a los otros dos?.
Le hablé de los portabebés ergonómicos y le pareció una buena idea…. Dentro de todos los que existen hay muchos que pudieran servirle, pero tres especialmente sin duda le facilitarían las cosas.
Por un lado la bandolera para el agua de Mis Canguritos. Con ella podria meterse en el agua en la piscina si hiciera falta, además el tejido con factor de protección 50 mantiene al bebé a salvo de las quemaduras solares (eso sí, ojo con las partes de su cuerpo que quedan sin cubrir y no olvides ponerle un “gorrete”.)
Por otra parte los niños ya eran suficientemente mayores y sabían nadar así que una buena opción es el fular Calin Bleu de gasa que es fresquito para que el bebé se eche una buena siesta sin perder de vista a unos o a otros.
Por ultimo, los Kangas son portabebés de telas africanas que puedes usarlo casi de tantas formas como imagines. Tan pronto es pareo, como toalla como portabebé y también ocupa muy poco espacio.
Los portabebés, como puedes ver, son una opción estupenda para no tener que llevarte la casa a cuestas cada vez que salgas a disfrutar de un refrescante momento. En cuanto al carrito, si te parece cómodo llévatelo, nunca biene mal y te puede ayudar para que tu bebé descanse en algún momento o incluso llevar en la bandeja de abajo algún juguete, las toallas, los bañadores de cambio….
Sobre todo no te dejes en casa las ganas de pasartelo bien y disfrutar de la crianza sea dónde sea.