Con la publicación en Estados Unidos del número 25 de la serie Conan the Cimmerian, se dió por acabada la colección. Este último episodio adaptaba el capítulo final de Sombras de Hierro en la Luna, un relato original de Robert E. Howard, y con él abandoron la serie el guionista Timothy Truman y el dibujante Tomás Giorello. El artista argentino se despidió a lo grande. La suya fue una trayectoria in crescendo dentro de la colección y podemos afirmar que su versión de Iron Shadows in the Moon está a la altura, y probablemente supera, a al clásico homónimo en Marvel a cargo de John Buscema y Alfredo Alcalá, nada menos. La finale incluyó además un innecesario portafolio que presentaba la visión de Conan por varios dibujantes del llamado comic independiente, con resultados de espanto.
Pero no se alarmen. A la semana siguiente dió comienzo The Road of Kings, la nueva miniserie escrita por Roy Thomas con Mike Hawthorne a los pinceles. El veterano guionista ya demostró no encontrarse en plena forma al volver a Marvel en los años noventa para recuperar al personaje que lo hiciera famoso, así que el escepticismo estaba servido. Los resultados, sin embargo, no están siendo muy decepcionantes. Pero ya hablaremos de eso en otra ocasión. Truman y Giorello volvieron en febrero de 2011 para adaptar La Ciudadela Escarlata, uno de los mejores relatos del autor de Conan. En España, Planeta De Agostini va por el número 15 de la colección, que recoge las grapas 19 y 20 USA. Con su acostumbrada política entre caótica y errática, han ido alterando tanto la periodicidad como el número de páginas de cada número para acelerar la edición, como y hicieran con Conan la Leyenda, en aquella ocasión recopilándolos de tres en tres. El final de Conan el Cimmerio, pues, se aproxima. Mientras, la editorial ha empezado a publicar Conan la Leyenda en tomos a la manera de Dark Horse, que recogen cada arco argumental en sendos tomos. Ya era hora.
Fran G. Lara