Hace ya nueve años que un grupo de activistas de la No violencia reunidos bajo el llamado “Albacete por la Paz”, con el inolvidable Diego a la cabeza
(vedlo en esta foto de 2008), nos convocaba a una pequeña concentración en el Altozano para con unas simples velas, un pequeño comunicado y un minuto de silencio, gritar un rotundo PARAD LAS GUERRAS.
Poco después, en marzo de 2007 la recién creada la Plataforma contra la militarización de Albacete empezó a difundir y sumarse a lo que ya se había institucionalizado todos los primeros domingos de mes. Y así durante más de 6 años, guerra a guerra, denunciando el tráfico de armas, los escandalosos gastos en defensa, siempre escondidos, o la Escuela de Pilotos de la OTAN que nos clavaron aquí, para el regocijo de los “pacifistas de salón” que aún siguen agradeciendo a Bono y a Barreda la proeza de traer a Albacete lo que ya desecharon en Jever (Alemania) o en Florennes (Bélgica). Hace dos años lo contábamos así en LA TERCA UTOPIA.
Hoy, 6 de septiembre de 2015, impresionados por esa foto de Aylan, el niño sirio de 3 años semiflotando yacente en una playa turca que simplemente nos ha puesto de nuevo en la agenda política y social el drama de las guerras y sus consecuencias, ConMilAB (la plataforma contra la militarización de Albacete) nos ha convocado de nuevo, quizás sin más opción de continuidad a las 20 horas (excepcionalmente en la Plaza de la Constitución por estar ocupado el Altozano) para gritar de nuevo, siquiera de manera silenciosa ese PARAD LAS GUERRAS.
Curiosamente hace 8 años, exactamente el 4 de noviembre de 2007 , nuestra convocatoria alrededor de la Bicha de Balazote en la Plaza del Altozano a las 20 horas, fue “para recordar a todos los refugiados y emigrantes que generan los conflictos bélicos, generalmente en países en vías de desarrollo y con armas fabricadas en el “primer mundo”.
Hoy, también lo hacemos, tal y como reza la página web de la plataforma por “ la terrible situación que están viviendo miles de personas en las fronteras europeas como consecuencia de las guerras que asolan Oriente Medio o África, (…) y, como no, para pedir que Albacete se sume a la red ciudades-refugio promovida por la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.
Espero que con esta llamada de atención el cinismos, no nos lleve a pensar que son los refugiados los que tienen en riesgo sus derechos, y no los inmigrantes por otras causas, ni que discriminemos entre el sufrimiento de un@s y otr@s. Todas las personas inmigrantes no emigran de sus países por capricho sino, como dice Javier de Lucas, por la brutal desigualdad que no para de crecer entre nuestro mundo rico y sus países pobres.
El texto leído hoy fue este.
Parad la guerra, simplemente eso. Por la Plataforma contra la Militarización de Albacete.
En primer lugar, muchas gracias a todos y todas por venir a esta concentración en contra de las guerras que durante años hemos repetido cada primer domingo de mes. Como en otras ocasiones queremos gritar un “Parad la Guerra” guardando un minuto de silencio en esta plaza de la constitución y hoy queremos, aprovechando el eco mediático de la terrible situación que se está viviendo en las fronteras europeas, mostrar nuestra solidaridad con todas esas personas que se ven obligadas a abandonar su tierra huyendo de la guerra, de todas las guerras. Queremos solidarizarnos con todos ellos, los que están en las fronteras de una Europa que nos avergüenza, pero también de aquellos que no salen en las noticias: en el Sáhara, en Sudán, en Palestina, Chad, Liberia, Sri Lanka, Argelia, Somalia, Irán, Irak, Afganistán, Kenia, Jordania, Líbano, Angola, Burundi, Congo, Ruanda y un largo etcétera de conflictos y víctimas olvidados.
Todos hemos visto la estremecedora imagen del cuerpo de Aylan, de 3 años de edad, yaciendo sin vida en una playa turca. Pero es una de las pocas imágenes que nos llegan de las verdaderas consecuencias que tienen todas las guerras, pues en todas, las principales víctimas son los niños. No hay guerras buenas o malas, sólo hay malditas guerras y los medios de comunicación no suelen mostrarnos esa durísima realidad. Por el contrario se nos venden con cierta frecuencia las dudosas bondades de la militarización de los estados.
Esas guerras ocurren en países lejanos pero en las que se utilizan armas generalmente fabricadas muy cerca de nosotros. Debemos recordar que en Albacete se fabrica el helicóptero TIGRE, el helicóptero de asalto más mortífero de los ejércitos europeos, o recibimos con los brazos abiertos al TLP, el programa de liderazgo táctico de la OTAN que permite que sobre nuestras cabezas se entrenen en tácticas de guerra sus pilotos. Y tenían la poca vergüenza de decir que “Albacete es la Ciudad de la Paz”. Desde la Plataforma contra la Militarización de Albacete llevamos denunciando que no se puede defender este compromiso con el militarismo mediante el “dinero aquí” pues siempre contestaremos “y dolor y muerte allí”, pues la imagen de Aylan es consecuencia directa de ese compromiso, de ese granito de arena, pues la guerra empieza aquí. Es la imagen de uno solo de los conflictos que asolan muchas partes del mundo. En abril de 2013 supimos que un bombardeo de la OTAN, de los pilotos de la OTAN, acabó con la vida de 10 niños. Solo en 2009, que sepamos, murieron en Afganistán 153 niños y niñas víctimas de los ataques directos de la OTAN.
El gasto militar declarado por los principales estados del mundo en 2014 fue de más de 1,2 billones de euros, un 20% más que el Producto Interior Bruto de España quien en 2014 gastó 9.000 millones de euros y acarrea una deuda en armamento de más de 35.000 millones. Pero, además, sabemos que desde 2012 el presupuesto declarado de Defensa en los presupuestos generales se ha ido aumentando “por la puerta de atrás” una media de un 37%. Más de 20.000 millones desde 2002 gastados al margen de los presupuestos, 2.100 millones en 2015. A esto hay que destacar que el presupuesto para 2015 en programas de ayuda a cooperación y desarrollo, que no llega a 1.800 millones. Tras un recorte acumulado del 70% en los últimos 5 años. ¿Y nos alarmamos por las imágenes que inundan los telediarios?
No deberíamos sorprendernos por esas imágenes de padres que corren con sus hijos en brazos, saltando alambradas con cuchillas asesinas, o la imagen de un bebé muerto en una playa. Es consecuencia de una política mundial por la que se compran más balas que kilos de arroz.
Y ante todo esto, obtenemos hipocresía de nuestros políticos que se niegan a acoger a estas familias desesperadas. Por eso invitamos a Albacete a sumarse a la red de ciudades-refugio promovida por la alcaldesa de Barcelona, esa populista que no popular, Ada Colau y a la que se han sumado otros ayuntamientos como el de Madrid, encabezado por otra impresentable Manuela Carmena.
Para terminar, acabamos con la frase que decía ante las cámaras de Al Jazeera, el jueves pasado, Kinan Masalemehi, un niño sirio de 13 años: “Por favor, ayuden a los sirios. Los sirios necesitamos ayuda ya. Nosotros no queremos ir a Europa, simplemente parad la guerra en Siria. Simplemente eso”.
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