Revista En Femenino
Yo no soy de hacer las cosas a medias. Soy más bien de esas que hacen las cosas en serio y consiguen sí o sí lo que quieren.
El otro día publiqué en Facebook un vídeo anunciando mi embarazo. Bueno… Es un vídeo que no me gusta demasiado porque estaba con muy poquita energía porque había estado hablando con diferentes personas antes de grabarlo que no habían sido del todo lo agradables que hubiera querido.
Bien, pues dentro de ese vídeo mencionaba que había comprado un montón de test de ovulación y de embarazo por amazon. Ahí debajo os dejo el link. Y os quería contar un poco qué estaba pasando por mi cabeza cuando hice eso.
Desde hace bastante tiempo ya que soy una mujer consciente de su cuerpo y sus ciclos. Muy conectada a la feminidad tanto física, como emocional y espiritual. En mi primer embarazo, que si bien era con otra pareja y no sería lógico comparar, tardé tres o cuatro años en quedarme embarazada. La verdad es que no hicimos más que quitar de en medio los preservativos, que es el único método anticonceptivo que he usado, ya que las pastillas hormonales no me apetece (solo las tomé una vez por salud y no sirvió de nada). Y no pasó nada en esos años. Al final acabé embarazada en un momento que no esperaba y profesionalmente, pensé, no me convenía.
Así que esta vez quería experimentar la consciencia de la concepción. Los dos primeros meses fui consciente que mis altos niveles de estrés no me venían nada bien y traté de trabajar esa parte. He descubierto que todo te ayuda a aprender tomando consciencia. Y como si el Universo confabulara a mi favor, puso en mi conocimiento la existencia del libro “Cuerpo de Mujer. Sabiduría de mujer” de la doctora Christiane Northrup. En él te invita a concebir de manera consciente, conociendo tu cuerpo completamente. Y la verdad es que experimentar ese control es simplemente mágico. Increíble. Te hace recuperar el poder y el control sobre el cuerpo.
Entonces, tras ver los diversos métodos, quise comprobar realmente en qué momento se producía la ovulación. Por tanto, al siguiente mes ya sabía que tenía que concebir en los dos o tres días anteriores. Y funcionó.
Yo sé que a veces da miedo enfrentarse a ese control y conocimiento. Descubrí el funcionamiento de mi ciclo, mi baja resistencia al estrés. Y fue un camino de consciencia interesante y con el que me sentí feliz.
En mitad de todo eso, buscando los test de ovulación descubrí que no sólo vendían esos test, sino que había packs de test de ovulación y embarazo. Como no estaba segura de cuánto necesitaría para conocerme, pedí uno de 60 Test de Ovulación y 30 Test de embarazo por 10.99 euros tenía todo eso y me lo traían a casa gratis en un par de semanas. Cuesta lo mismo que un test de farmacia y yo que no soy de hacer las cosas a medias, o me pongo o no me pongo, me parecía buena idea.
Al final me sobraron casi todos, pero ya se los di a otra persona que está en ello también.
La verdad es que es un gustazo conocer en cuerpo, tomar consciencia, respirar desde dentro y meditar para centrar el momento. Simplemente es disfrutar de un momento único y maravilloso ¿porqué no?
Aquí tenéis una foto que no he hecho yo, pero puedo asegurar que es real de cómo se ven los test a dos, un días antes de la primera falta y dos días después. Se ve perfectamente.
Yo desde luego ni me lo creía. ¡El primer test que usé daba positivo! Y ¡Era verdad!
Así que en mi caso, fue todo un descubrimiento.
Os recomiendo muchísimo el libro y estos test.
Ahhhh, el enlace para los test que yo compré es este. Los hay de diferentes cantidades en Amazon. Este me pareció óptimo.
Suerte y amor.
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