No olvidar de dónde viene uno es importante. Como decía el personaje de doña Rosa en “La Colmena” de Camilo José Cela, no hay que perder la perspectiva. Y creo que Izal no han perdido el norte, más allá de síntomas que puedan ponerlo de manifiesto, como el hecho de que una de las canciones de su último disco “Copacabana” se titule “Hacia el norte”.Y esta reflexión de inicio que planteamos en nuestra crónica del primero de los 3 conciertos que Izal han ofrecido en Madrid en el Teatro Circo Price presentando su 3er. disco de larga duración, viene a cuento por un momento del concierto en el que Mikel Izal reivindicó las salas pequeñas y el acto de acudir a ver actuar a bandas que quizás a día de hoy no tengan nombre relevante, para ayudar a crecer a esas formaciones y a la música en general. A continuación una imagen de Mikel bien escudado por Alberto Pérez.El grupo no olvida que no hace mucho se movían esos circuitos de aforos reducidos o mínimos y por ello creo que personalmente consideraron el concierto del pasado jueves (a falta de que se celebraran las 2 siguientes noches consecutivas en el mismo recinto) como “el más acojonante de nuestras vidas”; no creo que Mikel quisiera regalar los oídos de forma simple y banal a la audiencia de esa noche pocos instantes antes de finalizar la actuación, sino que así lo sentía.En estas primeras líneas busco explicar el motivo por el que quizás el concierto del jueves superó en su foro interno de percepciones al de abril de 2015 en el Palacio de los Deportes. Quizás Izal disfrutan y sientan cada noche como una celebración de un éxito muy trabajado. Y también es posible que ellos valoren más la calidad que la cantidad, ya que en el Price se reunieron entre 1500 y 2000 devotos, en lugar de los más de 10000 que estuvieron al unísono en la pasada primavera en la calle Goya.También, en aquel concierto, Mikel ya nos comentó personalmente que hubo unos fallos técnicos al inicio del show que siempre dejan al protagonista con un regusto levemente amargo (empatizo con ellos porque uno, como técnico de radio, nota esos fallos a la hora de realizar su trabajo), aunque para el público externo pasó la cosa desapercibida.Lo confesamos y seremos sinceros: a nosotros nos gustó mucho más lo del Palacio de los Deportes, pero lo que pasó el jueves en el Price tiene una importancia notable en muchos aspectos que iremos comentando ahora mismo y también nos agradó bastante. Además, ¿alguien se apuesta conmigo que para noviembre o diciembre de este año 2016, en el final de la gira de “Copacabana”, no vayan a tocar Izal nuevamente en el Palacio de los Deportes? No son parques, como dice cierta canción, pero son recintos de los que Izal puede decir “A los que volveremos”.Bien, pues llegamos al Price, lugar que habíamos visitado previamente con The Human League y el maestro Battiato y nos sentamos en nuestra localidad asignada, perfectamente situada en la 2ª fila del graderío derecho mirando al escenario para poder tomar buena nota de lo que iba a pasar. Por cierto, nuestra fotógrafa Susana Hernanz, por problemas personales, no llegó a tiempo al recinto para realizar su trabajo durante los 3 primeras temas. Por ello, las fotografías son las que un servidor pudo tomar desde la grada y con la limitación habitual que supone una cámara compacta ya un poco obsoleta.Un poquito antes de las 21.15h sonaba la megafonía teatral del recinto solicitando apagar los teléfonos móviles (hombre, por Dios…) y el quinteto compuesto por el teclista Iván Mella, el batería Alejandro Jordá, el guitarrista Alberto Pérez, el bajista Emanuel “Gato” Pérez y el guitarrista y cantante Mikel Izal se subían a las tablas en silencio propio, pero sobre el griterío del recinto completamente abarrotado.No quise leer el set list que la diligente y profesional gente de G-News y Hook Managemente nos facilitaron antes de entrar, pero intuía que Izal abrirían con “Copacabana”, la canción título. Y así fue. Esa proclama que comienza tan solemne con ese “Antes que nada dejaremos claras las páginas que nos importan…” enfervoreció a los asistentes que se sumaron a grito pelado al grupo. El vértigo de “Copacabana” se continuó durante unos minutos sin pausa posible, ya que Izal encadenaron ésta con “Asuntos delicados” y “Hambre”, 2 de los singles rutilantes del previo “Agujeros De Gusano”. Tras este terceto de potencia y vértigo, Mikel pudo respirar para confesar al público que intuía que esa sería una gran noche. No se equivocaba.Estructuralmente nosotros tenemos la sensación de un concierto que arrancó arrollador, y luego afrontó una bajada de intensidad para luego ir poco a poco escalando hacia la cumbre del desenfreno. Tras el arreón inicial se dispusieron la sesuda “En aire hueso”, la melancólica “Despedida” y algún tema tan tradicionalmente celebrado como la apertura del primer lp “Magia Y Efectos Especiales” “Prueba y error”. Aquí les insertamos el video que grabamos de un tema que nos encanta, “Despedida”.
No tardó mucho en aparecer el set más íntimo, que no necesariamente acústico, en el que sobre el escenario se montó el particular Club Copacabana de los Izal, con mesitas de bar con lámparas de luz tenue, y una locución pregrabada presentando esa sección (lo pueden apreciar más o menos en la foto de arriba de este párrafo; la iluminación del Price no nos permitió ni mucho menos unas fotos con demasiado brillo). Un pasaje éste del show en el que hubo lugar para seguir rememorando el 1er. disco de larga duración del grupo con “Sueños lentos y aviones rápidos”.Estamos en la gira de “Copacabana” y el escrutinio de temas del disco fue generoso, si bien creo que alguna no cayó. Fue sorprendente el momento en el que “Extraño regalo” y su estribillo sonó insertado como final de “Arte Moderno”, una de las nuevas canciones. No obstante, quizás la canción más celebrada del disco fue la que sonó como última de todo el listado; eso lo comentaremos unos párrafos más adelante. Arriba del párrafo Iván Mella en los teclados y abajo verán a Alejandro Jordá bien concentrado en su batería.Por lo que tenía mucha curiosidad era descubrir cuáles de las canciones del maravilloso “Agujeros De Gusano” se caerían del set list. De su 2º disco, del que ya creemos que a mitad de la década es uno de los discos que quedarán para el recuerdo de la misma, resultaron damnificadas para nuestro disgusto “Jenna Fischer” y “A los que volveremos”. Mantuvieron el tipo los singles ya comentados y “Pánico práctico”, que apareció en el bis, y al margen “Palos de ciego” (en el momento íntimo del Club Copacabana y con ayuda de Martin al vibráfono) y la canción título, situada ésta en el tramo final.El grupo fue subiendo poco a poco la rueda de intensidad hacia el tramo final. Se fueron sucediendo momentos tan bien recibidos como “Tu continente”, cosa que se intuía cuando el ukelele se veía en las manos de Mikel, la soberbia “Magia y efectos especiales”, y “La mujer de verde”, que ha terminado por ceder el puesto de cierre de actuación como último tema del bis (sorpresa que me reventaron unas chicas sentadas detrás de mí, que sí que leyeron el set list antes de comenzar el show y lo comentaron antes de comenzar la actuación). Tras este hit de Izal, que por otro lado quizás no sea de las que más nos lleguen a nosotros de su repertorio, el grupo se bajó del escenario para luego retornar con el bis. Y aquí nuestro video de “Tu continente”; no esperen buena calidad ni de audio ni de imagen.
Se intuía lo que se metería en el bis, viendo el tiempo que quedaba para las 2 horas de actuación (duración que intuíamos que tendría el show). No habría lugar para sorpresas y sí para cosas que no deben faltar a día de hoy en un concierto de Izal. Primero empezaron a sonar las notas alegres y luminosas acompañadas de silbidos que dan la personalidad a “Qué bien”. La buena estructura del Price, con generoso hueco entre las localidades (poca gente lo vivió sentado, por cierto), invitaba al baile y a mimetizar esos pases tan graciosos del videoclip de la canción. Buena imagen abajo donde las cuerdas de Izal, Alberto, Mikel y Gato, se juntaron más que nunca.Luego llegó, como ya anunciamos líneas atrás, “Pánico práctico”, quizás nuestro tema favorito de Izal en este momento (por eso abajo de este párrafo les dejamos el video que grabamos de ella) y que disfrutamos como se merece y “El baile”, uno de los temas de “Copacabana” que llevan camino de ser uno de los clásicos que más claramente queden del 3er. lp de Izal.
En “El baile” Alejandro e Iván dieron un paso al frente y el grupo afrontó en línea (vean la fotografía de debajo de estas líneas) la interpretación de la misma hasta que Mikel se desmelenó y micro en mano se metió entre el patio de butacas. Con “El baile” se puso final al show que terminó con el grupo despidiéndose al ritmo de “Copacabana” de Barry Manilow.Con estas 2 horas Izal presentaron su lp “Copacabana” en la 1ª de 3 entregas seguidas en Madrid. Fue una ocasión más para comprobar lo que Izal mueven a día de hoy, que es mucho. Mikel, Alberto, Gato, Alejandro e Iván lo dieron todo en este concierto donde no se apreció fallo alguno. El logo de “Copacabana” presidió iluminado el telón de fondo durante casi toda la sesión y se apagaría durante unas horas a eso de las 23.15h del jueves noche.Aún quedaban en esos momentos otras 2 noches más, ya celebradas en estos momentos, donde el grupo reafirmaría su posición y reinado como la banda sensación de los últimos tiempos en el territorio indie musical español. La imagen situada aquí debajo muestra a Mikel inmerso dentro del público en mitad de “El baile”. Afinen la vista y a ver si le localizan.El concierto que estamos ya terminando de narrarles, fue tan compacto y férreo que nos cuesta identificar los momentos álgidos del mismo (cosa que normalmente dejamos claro en nuestras crónicas); quizás “Tu continente” fue uno de los pasajes que destacaron algo más que el resto (sobre todo por su intro misteriosa y marciana, donde Iván y sus ambientes creados en sus teclados tuvieron mucho que ver), pero esto lo escribimos casi forzándonos a destacar algo sobre un conjunto tan igualado en su solvencia lineal de actuación.Estoy seguro que los padres de Mikel, que iban a asistir según anunció el propio sr. Izal durante el concierto a la actuación del día siguiente, estarán muy orgullosos de su “hijo descarriado”. El fenómeno Izal se afianza con justicia y lo de esta semana en Madrid así lo certifica. Ser el único grupo que no duplica, sino que triplica actuación dentro del Inverfest que se está llevando a cabo con varias actuaciones en el Teatro Circo Price, creo que es una prueba meridiana. Para “DMR” fue un placer y un honor poder asistir y contarles lo que sucedió. Agradecemos a la gente de G-News y Hook Management que nuevamente hayan contado con nosotros, en especial a Gloria González.