Sex Museum son a estas alturas para el que escribe palabras mayores, hablamos de una formación de más de 30 años de actividad a los que no les he visto un concierto malo en la vida, y debo de llevar unos 25 aproximadamente. Es difícil de explicar cuando has visto a una banda muchas veces, y sabiendo que son unos profesionales como la copa de un pino, y que no te van a defraudar, te vuelvan a sorprender, te den otra vuelta de tuerca más, y eso me pasó anoche con la banda de Malasaña, otra vez. Venían a presentar Musseexum, su último trabajo de estudio editado en el último tercio de 2018, un trabajo que si en estudio suena rompedor, no digamos en directo.La formación sigue siendo, la que lleva unos 18 años seguidos aproximadamente, es decir, Miguel Pardo a la voz, Fernando Pardo a la guitarra y coros, Marta Ruíz Perdiguero al hammond, Javi Vacas al bajo y Loza a la batería.
Como es lógico el repertorio estuvo dominado por temas del último trabajo, así cayeron Dopamina (tema que abrió el concierto), Breaking the robot (Brutal), Plummed Serpent, Soldier doll, Microdosis, Lucky Man (¡¡¡como sonó este tema!!!), Shine, la versión de Dead Moon de Walking in my grave, First Times, Break out, Outsiders, Riots y Horizons, o sea todas las canciones que componen el trabajo.De viejas canciones hubo varios rescates, el mítico Two sisters de Nature's Way de 1991, Flyin' high y We can move del Sonic, Street fight y Red Ones del Speedkings, Unidos del United (la versión de Parálisis Permanente), You del Three Fabulous Furry de 1992, más ese single que sacaron para el Fifteen hits that never were llamado Wassa Massa.
En definitiva una banda que cada vez suena mejor, y que no dejan de dar lecciones de rock en estado puro, unos titanes del rock patrio. Tablas ahí arriba, actitud, buen hacer, sonido impecable, sangre, sudor y rock a tope en el escenario. Una sala llena y entregada hace el resto y apoya a una formación que se merece el mayor de los reconocimientos.
Yo os dejo con el tema Lucky Man tal y como sonó anoche.