Un profesor de lengua, Mark, entra en la cárcel por atropellar y matar a un hombre al conducir borracho. Allí es puesto bajo la vigilancia de Eric, uno de los funcionarios de la prisión, profesional e íntegro pero cuya situación se complica cuando su hijo entra a su vez en otro establecimiento penitenciario y uno de los reclusos utiliza la situación para chantajearlo, este es el planteamiento inicial de "Condena" la nueva miniserie de Movistar+.
Uno de los platos fuertes de la temporada en cuanto a la producción no propia de Movistar + es esta miniserie de solo 3 capítulos en la que la BBC pone todo su savoir faire al construir un sólido drama carcelario basado en el carisma de sus dos protagonistas, Sean Bean y Stephen Graham, y en una historia clásica de culpa y redención con ribetes trágicos.
Condena triunfa al ofrecer un relato que evita el sensacionalismo con una mirada puede decirse que sincera de la realidad de un centro penitenciario, sin edulcorarla y sin eludir el componente de denuncia a la hora de abordar las complejas tramas de extorsión y delincuencia entre los presos por un lado, y por el otro la falta de oportunidades que han propiciado en parte su situación de reclusión.No obstante, la crítica al sistema carcelario no se mete en complicaciones; no cuestiona al propio sistema al centrarse en un recluso que acepta su condena y aprovecha su estancia en prisión para redimir su culpa e intentar buscar el perdón de la familia de su víctima. El guión muestra también un estricto discurso moral de respeto a las normas en cuanto al otro personaje, el funcionario obligado a corromperse para proteger a su hijo, que deberá pagar, también con la misma resignación, un precio por ello.
Es evidente que nos encontramos ante un relato clásico, y por lo tanto también conservador, no necesariamente en un mal sentido, cuya arquitectura narrativa se basa en el contraste entre dos personajes, uno en proceso de redención y otro en proceso de caída, aderezado con unos cuantos personajes secundarios bien esbozados. Un producto que no pretende ser innovador ni llevar a cabo una gran aportación al género carcelario, pero que sí consigue ser una muestra más que digna del mismo.
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- ##check## Lo bueno
- El carisma de los dos actores protagonistas, Sean Bean y Stephen Graham.
Buen trabajo de construcción de personajes, tanto los dos centrales como los secundarios.
Un relato clásico de culpa y redención conservador pero bien construido. - ##times## Lo malo
- Es un buen entretenimiento pero no es innovador ni va a renovar el género carcelario.
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- Puntuación Total 7 / 10
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