Condottiere

¿Os acordáis de Ciudadelas? ¿Del simpático condotiero que destruía vuestras ciudades? ¡Pues aquí está su juego! ¡Ahora todos somos condotieros! Y puede que también aparezca su viejo amigo el obispo (ahora ascendido a Papa) para saludarle...
Estamos en la Italia del renacimiento cada jugador representa un condotiero, intentando conquistar cierto número de provincias antes que nuestros contrincantes.
Ficha técnica
Nº de jugadores: 2 - 6
Edad: 14+
Tiempo aproximado por partida: 30 - 45 mins.
Componentes

• 1 tablero de juego.
• 110 cartas.
• 1 marcador de condotiero.
• 1 marcador de favor papal.
• 36 marcadores de control (en 6 colores diferentes)

El juego
Condotiero es, básicamente, un juego de apuestas, el jugador con la ficha de condotiero (el más joven la primera ronda) decide cual será la próxima provincia por la que se luchará y una vez todos hayan apostado el que tenga el ejercito mayor se llevará el control de esta, aunque algunas cartas tienen efectos especiales sobre otras y pueden hacer que la apuesta acabe de repente o se destruyan ciertas cartas.
Las cartas que te puedes encontrar en el juego son estas:

• Mercenario: La carta básica del juego, el número que aparece en ella es la fuerza que añade a tu línea de batalla.
• Cortesana: Añade su fuerza a tu linea de batalla, pero además, el jugador que tenga más cortesanas en juego será el próximo condotiero aunque no gane la batalla.
• Heroína: Añade 10 a tu línea de batalla, pero no se ve afectada por inviernos, primaveras, papas o tambores.
• Tambor: Duplica la fuerza de tus mercenarios, pero no de cortesanas o heroínas.
• Rendición: la batalla acaba en ese momento, se resuelve y se sigue la partida de forma normal.
• Invierno: todos los mercenarios pasan a tener fuerza 1.
• Primavera: todos los mercenarios tienen fuerza aumentada en 3.
• Papa: Cuando se juega esta carta se destruyen todos los mercenarios de todos los jugadores con la mayor fuerza (si el mercenario más fuerte es un 6, todos los 6 de todos los jugadores se descartan de sus líneas de batalla). Además, quien haya jugado esta carta podrá coger el peón blanco del Papa y ponerlo en la provincia que quiera, esto la hará inmune a ataques hasta que alguien juegue otro Papa y quite el peón de ahí.
• Espantapájaros: Puedes subir un mercenario de vuelta a tu mano.

Al principio de cada ronda se reparten 10 cartas a cada jugador, y el jugador que tenga el peón de condotiero lo coloca sobre el lugar donde quiere que se realice la batalla.
Empezando por el condotiero cada turno cada jugador juega una carta de su mano, formando su "linea de batalla", o pasa su turno, si decide pasar ya no puede jugar más cartas en esta batalla (aunque puede seguir ganando si su linea de batalla es lo suficientemente fuerte como para superar a sus enemigos).

Cuando todo el mundo ha pasado (cuando solo quede un jugador por pasar, este podrá seguir jugando cartas mientras tenga o pase también) se suman los totales de las lineas de batalla, quien tenga el total mayor se lleva el control de la zona por la que se estaba luchando y el peón de condotiero. Si alguien ha jugado cortesanas en su linea de batalla el que más cortesanas haya jugado se lleva el peón, en lugar del jugador ganador. Se descartan todas las lineas de batalla (no solo la del jugador ganador) y continúa el juego.
El nuevo condotiero elige otra provincia por la que se luchará (que no puede ser una que ya haya sido conquistada o donde se encuentre el Papa) y se vuelve a empezar, no se vuelven a robar cartas hasta que sólo quede un jugador con cartas en la mano, en cuyo caso, éste podrá quedarse con hasta dos cartas de las que le queden y se descartará de las demás y se volverán a repartir 10 cartas a todos los jugadores, más una carta a cada jugador por cada provincia que haya conquistado hasta este momento.
El juego acaba cuando un jugador conquiste 5 provincias (o 3 adyacentes), o en el caso de partidas de 2 / 3 jugadores cuando conquiste 6 provincias (o 4 adyacentes).
Conclusión
Un juego con partidas muy rápidas y sencillo de aprender a jugar, aunque peque de situaciones tipo "gana quien tiene mas suerte" o de "no tengo ni idea de por qué he ganado" sobre todo al principio, pero si llevas una estrategia puedes contrarrestar parte de la mala suerte (está claro que si solo te sale una mano de espantapájaros y tamborileros... poco vas a hacer).
En definitiva, un buen "filler" en el que tras una partida o dos los novatos empezarán a hacer de las suyas y que permite que jueguen grupos relativamente grandes en poco tiempo (cuantos más jugadores menos provincias hay que conquistar).