Conferencia de Juan Antonio Marcos: ‘Juan de la Cruz y la interioridad’

Haz clic sobre la imagen para acceder al video

Audio

http://www.ivoox.com/juan-cruz-interioridad-humana_md_13605679_wp_1.mp3 Ir a descargar

Juan Antonio Marcos, ocd. pronunció la segunda conferencia de este año del Aula de Espiritualidad Pedro Fabro este jueves 3 de noviembre en el Aula P. Pérez del Pulgar C/ Alberto Aguilera, 25 de Madrid, a las 20:00h.

Juan de la Cruz y la interioridad humana

(‘Atención a lo interior’)

   Juan Antonio Marcos

Universidad P. Comillas (Madrid)

  La interioridad humana puede convertirse en un ‘lugar de sentido’ para todo el que anda buscando. Un lugar que tiene mucho que ver con los paisajes del alma, con los espacios interiores de la persona, como muy bien sabían los místicos: san Juan de la Cruz, sí, pero no menos santa Teresa… ¡Ah, aquella mujer que tanto sabía de los rincones del alma! Y porque morada, casa, templo, castillo, mansión…, son mucho más que metáforas. Como ocurre con la anhelada ‘tierra prometida’ o el nostálgico ‘paraíso del Edén’ bíblicos, estamos ante espacios simbólicos y teológicos, cuyo significado más profundo se nos desvela al ponerlos en contacto con la propia interioridad humana.

NUESTRA CHARLA LA HEMOS DIVIDIDO EN TRES MOMENTOS:

1. [1º MOMENTO] Aunque resulte paradójico, hoy las casas se comienzan por el tejado, o sea, ‘desde arriba’. Y así comenzó la aventura de este mundo: con la iniciativa divina en todo, desde la creación hasta la salvación. Pues bien, desde allí, desde la ladera divina, hay que afirmar que todo es ‘gracia’, todo es don y regalo: Abrirse a la Vida, a la luz, al sol (como lo hace la COPA de un árbol) es hacerse conscientes de una Presencia y de una Alegría.
2. [3º MOMENTO] Pero en otro sentido no menos cierto, en la vida humana todo es ‘naturaleza’, trabajo, tarea: y, al igual que las RAÍCES de un árbol, tenemos que Cuidar la Vida cotidianamente, desde la Intimidad y el Silencio.
3. [2º MOMENTO] Entre la tarea y el don, entre la naturaleza y la gracia, entre el cielo y la tierra, entre Dios y hombre hay siempre un canal abierto de comunicación y recirculación. Como la savia a través del TRONCO, hemos que Dejar que la Vida fluya: y para dejar que la vida fluya tenemos que remover los obstáculos del camino, es decir, toda forma de ‘ego’ o ‘yo’ protagonista (el ego narcisista, el ego intelectual y el ego espiritual). Y esto es ‘tarea’ y es ‘don’ al mismo tiempo. Alcanzar la libertad interior será posible gracias al amor: ‘Mas el amor fue tan alto / que le di a la caza alcance’.