Revista Cine
"Los actores tienen una especie de vacío en el interior. Si no ¿por qué necesitan vivir la vida de otros? Creo que los actores saben que tienen una personalidad débil, que son grises, que son planos, y necesitan disfrazarse para parecer encantadores, inteligentes, misteriosos. Les falta madurez...Cuando Fellini necesita que alguien interprete a un personaje que no es maduro ni serio, me llama a mí... Me gusta el mundo de Fellini y lo entiendo muy bien, lo que nos ahorra tiempo. No tiene que explicarme nada, a no ser algunos pequeños gestos. Además, somos amigos y siempre se trabaja mejor con amigos...El director es el auténtico creador de la película. El actor es sólo un instrumento... El director te entiende mejor de lo que tú te entiendes a ti mismo y por eso te puede usar tan bien...En Italia la gente simpatiza con los personajes que he hecho... Soy un poco pasivo -a diferencia de Gassman, que es mucho más agresivo- y por eso tengo tan buena química con Sophia Loren. Ella y yo nos complementamos, como Laurel y Hardy. Sophia es inteligente, bella y tiene un gran sentido del humor. Cuando hacemos alguna película juntos, ella es la que actúa, yo nomás reacciono".
Marcello Mastroianni en una entrevista en Film Comment, abril de 1983.