
En un instituto, el último día de clase, una profesora se despide de sus alumnos y, además de anunciarles que deja la escuela, les confiesa que su hija de cuatro años que, aparentemente, murió ahogada en la piscina de la escuela, fue en realidad asesinada por dos estudiantes de esa misma clase. También les hace saber que ya ha puesto en marcha su venganza.

No han cumplido 14 años y la ley los protege, no los puede castigar, no los considera responsables de… ¿un crimen? Será la víctima, madre de la niña asesinada, la que organice un complejo plan para vengarse.

Dos alumnos son los señalados. Uno enloquece entre las paredes de su domicilio, y el otro, aparentemente, continúa con su vida, como si no hubiera pasado nada.

Un profesor nuevo, con sobredosis de optimismo. La delegada de clase que se acercará a terrenos peligrosos. Ella averiguará el objetivo verdadero de las conductas del protagonista.
Me ha gustado mucho. El guion y sus constantes giros. La perspectiva variable con diferentes voces y pensamientos. La profundidad que va más allá de hechos macabros y brutales. El ritmo frenético de la última parte de la cinta. La ambientación, la fotografía, y la música. ¿Valoran su propia vida algunos de estos chicos?
Título original Kokuhaku. DirectorTetsuya Nakashima. Guión Tetsuya Nakashima (Novela: Kanae Minato). Música Toyohiko Kanebashi, Boris, Radiohead. Fotografía Shoichi Ato, Atsushi Ozawa. Reparto Takako Matsu, Masaki Okada, Yoshino Kimura, Yukito Nishii, Kaoru Fujiwara, Makiya Yamaguchi, Soichiro Suzuki, Kinuwo Yamada, Ai Hashimoto. Japón 2010, 106 min.
