Nacho Villa, director de Radio Televisión Castilla-La Mancha durante el Gobierno de María Dolores de Cospedal, deberá indemnizar con 6.000 euros a Comisiones Obreras por vulnerar los derechos fundamentales de huelga y libertad sindical. La sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha desestima el recurso interpuesto por Villa para librarse de la condena, confirmando así la obligación de compensar económicamente al sindicato por los daños morales causados y ratifica de esta manera la condena impuesta a Nacho Villa hace casi un año por un juzgado de Toledo. Los hechos, por los que es sancionado con una indemnización de 6.000 euros en concepto de daños morales, ocurrieron los días 25 y 27 de abril de 2015, cuando el director de la cadena que entonces era denominada mediáticamente como 'TeleCospedal' impidió al secretario de la Federación toledana de Servicios a la Ciudadanía de CCOO, José Luis Arroyo, entrar en la sede del ente público durante la celebración de paros de los trabajadores. La intención de Arroyo, que comunicó al propio Villa, al director general financiero y al director técnico de la cadena pública, era acompañar a los empleados en su condición de asesor sindical.
Nacho Villa y el extracto de la sentencia del alto tribunal castellano-manchego.
Tras conocerse la sentencia, Arroyo ha valorado dicha decisión judicial porque, a su juicio, “vuelve a confirmar un hecho, que Nacho Villa y la expresidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, que lo nombró, violaron el derecho a la huelga de los trabajadores y la libertad sindical. Nos alegramos de que esa vulneración sistemática que ha venido haciendo Villa no haya quedado impune, asevera el representante sindical, quien considera que, durante la anterior legislatura, hubo ‘una etapa negra’ en la televisión pública de Castilla-La Mancha bajo la dirección de Villa”. Arroyo recuerda que, en la época de 'TeleCospedal', se emitían “noticias vergonzosas” y, como ejemplo, apunta una en la que se ilustró el asesinato de una vecina de la localidad de Cifuentes a manos de su marido, carnicero, con una picadora y los cuchillos que se utilizan para cortar y descuartizar la carne.
“No hay ningún periodista en España –dice a la sazón . Rodríguez en ElPlural.com–, ni siquiera en la caverna mediática más profunda (incluidos Sostres, Burgos, Inda o Marhuenda), como Nacho Villa, exdirector de Radio Televisión Castilla-La Mancha, hoy Castilla-La Mancha Media (CMM), tan cuestionado como para erigirse en el profesional más denunciado y condenado por los tribunales de justicia de España por alterar, manipular o vulnerar derechos fundamentales de los periodistas que durante cuatro años estuvieron bajo sus órdenes en la televisión pública castellano-manchega, a la que llegó por orden expresa de la hoy ministra de Defensa y presidenta del Gobierno manchego entre 2011 y 2015, María Dolores de Cospedal, que en contra de la opinión del propio Mariano Rajoy colocó al que entonces era el locutor más polémico de la Cope al frente del ente manchego. Una condena más que se suma a larga lista de rapapolvos judiciales del que fue el cargo público mejor pagado del Gobierno de Cospedal (120.000 euros), que lo mantuvo desde su nombramiento en el verano de 2011 hasta el final de su mandato en agosto de 2015, que no tuvo la suficiente valentía para dimitir o, como mínimo poner su cargo a disposición del nuevo presidente del Gobierno manchego, el socialista Emiliano García-Page”.
Cabeza visible de los numerosos casos de manipulación del ente y de llevarlo a ser el medio público autonómico menos visto por detrás incluso de Telemadrid, Villa se gastó un total de 133.818 euros en cuatro años. Los gastos pertenecen a dos visas oro que se le entregaron para gastos de representación y que el polémico exlocutor de la Cope se negó a desglosar al Comité de Empresa y a la oposición durante la legislatura presidida por María Dolores de Cospedal. Hasta que el Partido Socialista al gobierno y se encontró que RTVCM escondía una deuda de ocho millones de euros. Entre ellos, los asientos de las visas recogían el pago en hoteles y restaurantes de alta gama, la mayoría localizados en Toledo, alguno de ellos utilizado hasta en 228 ocasiones (la hambruna de Villa era brutal), con un gasto de 15.000 euros. El director de Cospedal también cargó al bolsillo de todos los castellano-manchegos gastos en restaurantes de lujo, hoteles de cinco estrellas y miles de euros (sobre los 20.000) en la red de paradores de Castilla-La Mancha. Habrá que esperar a una nueva sentencia para conocer un caso más del periodista de cabecera de Cospedal.