Madres y padres, si vuestro hijo o hija está por cumplir años en las próximas semanas este es vuestro artículo. ¿Cómo conseguirlo? Si seguís los consejos e ideas que os proponemos seguro que haréis que la fiesta de vuestro hijo sea la más memorable de todas.
Para asegurar el éxito de su fiesta, los padres deberán escoger una temática basada en los gustos de sus hijos y apostar por una decoración a la altura.
En primer lugar hay que tener en cuenta la edad del niño y por lo tanto, enfocar la fiesta acorde a esa edad. Los niños crecen tan rápido que un día pueden estar obsesionados con su dibujo animado favorito y al día siguiente decirnos que ya son mayores para ese tipo de cosas. Por eso, pensar en qué etapa es la que están viviendo os dará una idea de cómo enfocar la fiesta. Nosotros os proponemos distintas opciones que van desde las primeras fiestas de cumpleaños hasta las fiestas para preadolescentes de hasta 13 años.
La fiesta del primer año de vida de un hijo suele ser un acontecimiento que los padres queremos celebrar por todo lo alto pese a que la presencia de niños, más a allá de los familiares, no esté siempre asegurada. De todas maneras, como es una fiesta dedicada a un niño, escoger colores pastel como el rosa, azul, verde, amarillo o gris y blanco es una buena opción. A partir de aquí, decorar el espacio en el que se va a celebrar con globos de esos colores e incluso con los llamados globos foil con la edad del pequeño y los tiernos globos de confeti, es una de las mejores ideas.
En las fiestas de cumpleaños es especialmente importante el pastel, la comida y la bebida que se servirán a los invitados independientemente de la edad del niño, por eso una de las tendencias más recurridas en los últimos años es la de apostar por las mesas dulces o candy bars. Es decir, idear una mesa que sea el foco de atención de la fiesta en la que el pastel esté centrado y al que le acompañen dulces y pasteles presentados de una manera muy elegante y con una decoración acorde a la temática o la gama de colores escogida.
Cuando nuestros hijos empiezan a crecer, los padres somos más conscientes de sus gustos y debilidades, por eso apostar por dedicarle su fiesta de cumpleaños a su personaje de dibujos animados o deporte favorito es una gran idea para ver una genuina sonrisa en sus caras. Imaginaos la reacción de vuestro hijo al llegar a su fiesta de cumpleaños infantil y que el lugar esté decorado con globos, pancartas, platos y una tarta en la que esté la imagen de Spiderman, los Minions, la Patrulla Canina o Rayo McQueen de Cars.
Si en cambio esa etapa en la que los personajes de los dibujos animados está ya superada, otra opción es organizarle una fiesta temática de piratas, marineros o de alguno de sus deportes preferidos como el fútbol, el baloncesto, el baile o el béisbol. En este sentido, un acierto por vuestra parte será organizar la fiesta en un lugar abierto que permita hacer actividades relacionadas con ese deporte como por ejemplo un pequeño campeonato de futbol mixto en el que participen niños y adultos, una yincana que incluya lanzamientos a canasta, rebotes y pases o idear una coreografía conjunta que será presentada antes de finalizar la fiesta. Es decir, buscar la manera de mantener a los niños entretenidos en la que los padres también estemos incluidos y disfrutemos de jugar con ellos.
Para finalizar os proponemos una opción dedicada a niños de entre 10 y 13 años. Son las llamadas fiestas luminosas, una idea original de organizar el cumpleaños de vuestro hijo en el que toma especial relevancia la oscuridad para que sea efectiva. El objetivo de una fiesta luminosa es que en la oscuridad se puedan percibir los globos LED, palos, gafas y pulseras fluorescentes o los dibujos hechos con maquillaje luminoso en la cara de los niños. Para conseguir el resultado deseado los padres tenemos que asegurar a los niños que si se pintan la cara con las pinturas fluorescentes o se disfrazan con gorras, pulseras o collares luminosos, cuando finalmente se apague la luz se divertirán muchísimo. De esta manera fomentaremos la curiosidad de los niños, que estarán deseando que ese momento llegue lo antes posible.