Iván Fischer director de orquesta húngaro presentó una mascarilla acústica contra el COVID-19. La mascarilla consta de dos manos de plástico alrededor de las orejas y con la cual se logra una experiencia musical en un concierto.
La mascarilla he llamado el interés internacional de China Japón, países europeos y americanos como Estados Unidos y México”.
Fischer recuerda que al poner las manos ahuecadas en forma de cascara detrás de los oídos la música suena “más cálida y fuerte” y que por eso ha inventado “la mascarilla para mejorar la acústica”.
Las mascarillas ya se encuentran a la venta en la oficina de la BFZ por un precio de 22 euros (unos 26 dólares). Además la jefa de prensa agregó que hay gente que considera la mascarilla como un símbolo de la pandemia, mientras que otros la compran como un objeto de decoración. Una persona que compró la mascarilla, anhelaba algo así porque sufre de problemas de audición y siempre ponía sus manos detrás de sus oídos para disfrutar los conciertos.
El director es un propulsor sobre el uso de las mascarillas, incluso expresó que los espectadores solo podrán acudir a los conciertos de la BFZ sin síntomas referentes a la enfermedad. Asimismo, solo deberán desinfectarse las manos al entrar en el edificio y usado correctamente las mascarillas.
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