Conoces en que consiste una diálisis
La diálisis es un proceso por medio del cual se produce un filtrado artificial de la sangre. En éste, se retiran los elementos tóxicos del torrente sanguíneo cuando los riñones han perdido su capacidad. Este sistema suele utilizarse en pacientes que padecen de insuficiencia renal, pero también sirve para remover de manera más rápida las drogas o sustancias tóxicas en situaciones agudas.
Cuando una persona ha perdido el 90 por ciento de la función renal, se le considera un enfermo de insuficiencia renal crónica.
Existen dos tipos de diálisis: la hemodiálisis y la diálisis peritoneal.
La diálisis peritoneal elimina las toxinas del organismo por medio de una membrana que recubre los órganos de la cavidad abdominal llamada peritoneo. En este tipo, se le infunden soluciones especiales que contribuyen con la eliminación de las toxinas, se mantienen ahí por un lapso de tiempo y luego son drenadas. Este tipo de diálisis puede hacerse desde la casa, pero debe realizarse todos los días.
En la hemodiálisis, la sangre pasa a través de un aparato que realiza el filtrado, la mayoría de los pacientes se someten a hemodiálisis durante 3 sesiones cada semana y cada sesión dura de 3 a 4 horas.
Antes de realizar una diálisis es fundamental controlar: la presión sanguínea, la temperatura, la frecuencia cardíaca, la frecuencia respiratoria, el peso, hacer una evaluación del tórax y un examen del acceso venoso. Es importante tener en consideración que el proceso es bastante largo y tedioso.
Los riesgos inmediatos que implica la diálisis son: hipotensión, infecciones, desequilibrio de electrolitos, sangrado en el sitio del acceso, náuseas, vómitos, calambres, reacción al dializador, embolia gaseosa, e isquemia o arritmia cardíaca. En cuanto a su efectividad, ambos sistemas son iguales, sin embargo los pacientes tienden a preferir la hemodiálisis.