20 | 08 | 2018
La forma en que utilizamos la luz artificial influye en la decoración y en las sensaciones que nos transmiten el ambiente de una estancia. Por otra parte, la iluminación se puede emplear para realzar, atenuar o modificar la percepción de los colores, las texturas y el espacio. Por este motivo, es importante conocer los estilos de iluminación y sus características antes de comprar las lámparas con la que decorarás tu hogar.
Además de las fuentes de luz (bombillas), los tipos fundamentales de iluminación son general, puntual, ambiental y decorativa, lo que se consigue al comprar lámparas adecuadas para producir luz directa, indirecta, difusa y semidirecta, según nuestro objetivo.
TIPOS DE ILUMINACIÓN SEGÚN EL MODELO DE LÁMPARA
Los tipos de iluminación básicos son cuatro: general, puntual, ambiental y decorativa. La teoría más extendida para iluminar un ambiente se basa en la combinación de iluminación general y puntual, que se pueden complementar con iluminación ambiental y decorativa.
Combinar distintos tipos de luz en una misma estancia es el recurso decorativo utilizado por los interioristas para planificar la iluminación de hogares y locales públicos.
La luz general es la que se utiliza para tener visibilidad en una estancia. Comprar lámparas para iluminación general es quizá lo más sencillo, pues se suele conseguir con modelos de techo o apliques que puedes encontrar sin problema en tu tienda de lámparas. Conviene evitar lámparas que generen sombras o contrastes muy elevados, por lo que lo más adecuado es elegir modelos de luz difusa que se instalen por encima de los ojos.
La iluminación puntual o focales más intensa y se emplea para iluminar zonas de trabajo, en las que se requiere mayor visibilidad. Es una iluminación complementaria que se consigue con lámparas de pie o de sobremesa. Para las cocinas existen soluciones como las luces sobre una guía colocada bajo los armarios superiores. Nuestro consejo para comprar lámparas de baño suele ser suficiente con comprar apliques o lámparas de pared que se instalan junto al espejo.
La iluminación general y focal se deben complementar, evitando deslumbramientos y sombras en las zonas de trabajo. Por otra parte, la iluminación ambiental se consigue con lámparas de luz difusa (de pie o de mesa), preferiblemente que dispongan de reguladores de intensidad con los que adaptar el nivel de luz al ambiente deseado.
Finalmente, la iluminación decorativa se emplea para destacar objetos, como cuadros, plantas y esculturas, y para realzar detalles arquitectónicos.
Los estilos de iluminación también dependen de la cantidad de luz y su forma de proyección. En este sentido, hablamos de luz directa, indirecta, difusa y semidirecta.
Cuando el haz de luz se dirige completamente sobre la zona a iluminar hablamos de luz directa. En nuestra tienda de lámparas online puedes encontrar modelos de lámparas colgantes perfectos para esta función.
Si buscas una iluminación indirecta, es mejor comprar lámparas que proyecten el haz de luz hacia el techo. La iluminación semidirecta se consigue con una lámpara de difusor translúcido, que evita sombras y deslumbramientos. Si el difusor está abierto en la parte superior, las sombras serán mucho más suaves.
A la hora de comprar tus lámparas para combinar los diferentes estilos de iluminación debes tener en cuenta que la cantidad de bombillas y el tamaño de la lámpara sean adecuados para las dimensiones de la habitación.
Combinando estos elementos podrás variar el efecto de la iluminación sobre la decoración y crear diversos ambientes.