Revista Diario
Ya no puedo ni poner las noticias. Me pone enferma oir cada día nuevos casos de corrupción. Me pone enerma ver el comportamiento de los políticos que no nos gobiernan, sino que tienen en sus manos nuestras vidas y hacen lo que quieren de ellas. Me ponen enferma sus comparecencias de tres al cuarto, donde hablan como si los ciudadanos de los cuales viven fuéramos idiotas.
La gente está harta. Los casos de corrupción crean rabia e impotencia. Estas pueden llevar a la delincuencia y a la violencia: desde el que cometerá un delito porque ya no le queda nada y tiene que alimentar a sus hijos, hasta el que estará de vuelta de todo y se volverá violento porque ya no cree en el sistema, pasando por un amplio abanico de gente que puede delinquir o ir más allá por diversos motivos.
Señores políticos: entiendo que el poder y el dinero os ofusca, pero, si no sabéis llevar un país, si no sabéis salir de la crisis, si no sabéis crear empleo... si la sombra de la sospecha de la corrupción planea sobre vuestras cabezas... POR QUÉ NO DIMITÍS? Es lo que estamos esperando la mayoría. POR QUÉ NO ESCUCHÁIS?
La gente está harta. Los casos de corrupción crean rabia e impotencia. Estas pueden llevar a la delincuencia y a la violencia: desde el que cometerá un delito porque ya no le queda nada y tiene que alimentar a sus hijos, hasta el que estará de vuelta de todo y se volverá violento porque ya no cree en el sistema, pasando por un amplio abanico de gente que puede delinquir o ir más allá por diversos motivos.
Señores políticos: entiendo que el poder y el dinero os ofusca, pero, si no sabéis llevar un país, si no sabéis salir de la crisis, si no sabéis crear empleo... si la sombra de la sospecha de la corrupción planea sobre vuestras cabezas... POR QUÉ NO DIMITÍS? Es lo que estamos esperando la mayoría. POR QUÉ NO ESCUCHÁIS?