En el blog Psicoglobalia, David Cortejoso ha compartido consejos muy útiles de cómo actuar cuando ocurren las peleas de hermanos, los comparto a continuación:
- Tiempo fuera: usar la técnica que en psicología se llama “tiempo fuera” con ambos, es decir, sacarles de la situación y lugar donde ha ocurrido.
- Origen de la discusión: averiguad la causa u origen, no para culpabilizar a ninguno de los dos, sino de averiguar la causa para encontrara el remedio. Lo ideal es que cada progenitor estuviera con uno y luego hablarais entre vosotros, para contrastar lo que os han dicho.
- Razonar el conflicto: no es adecuado que os dediquéis a echar la culpa al que lo ha originado. Hablad con él desde el razonamiento, no desde el resentimiento. No le demostréis que chillar, culpabilizar, ridiculizar… son formas de solucionar los problemas.
- Promover que resuelvan sus diferencias: intentad siempre que sean ell@s los que alcancen la solución, que la propongan, que lo negocien y que se impliquen en resolverlo. Si es difícil o no arrancan, entonces un pequeño empujoncito no viene mal.
- Nunca comparar: No os dediquéis a compararlos, a comparar sus comportamientos o actitudes, eso sólo conseguirá fomentar envidias, mayores celos, represalias…
- Flexibilidad: un estilo estricto de crianza no es lo más adecuado, pero tampoco el permisivo. Debe haber unas reglas y unas normas en el hogar, aunque en ocasiones debamos ser algo flexibles con las mimas.
- Fomentar los juegos y las actividades en común: así aprenderán a cooperar, y se fomenten también sentimientos de afecto, respeto y cariño.
- Buscar información: Podemos ayudarnos de material auxiliar, libros, dibujos animados, cuentos, que hablen de esta temática. Mirad en librerías y bibliotecas, seguro que encontráis. Rosa Jové nos recomendó “Querer a todos por igual” de Nancy Samalin y Elizabeth Fodor “Estoy celoso” de Trace Moroney, SM.
- Comunicación: Cuando la causa sea por competir por vuestra atención y cariño, los típicos celos entre herman@s, hablad con ellos por separado, preguntarles por sus temores, y dedicadles tiempo y que sea de calidad.
- Escucharles: Es bueno siempre fomentar el hecho de que los niñ@s se expresen y cuenten sus sentimientos y emociones, que no repriman. Debemos estar muy atentos y escucharles.
- Un truco imprescindible para estas situaciones: paciencia + constancia.
- No se debe fomentar la competitividad entre herman@s, ya que eso mismo ya genera conflictos. No os dediquéis a decir frases como “vamos, que tu hermano como mucho más deprisa” o “¿todavía no has recogido?, tenías que aprender de tu herman@”…
“Cuando las peleas son sucesivas y alteran el funcionamiento normal de la familia, puede ser el momento de pensar que hay algo que está fallando. En estas situaciones es adecuado que acudáis a un psicólogo especialista, para que averigüe las causas y nos de las pautas oportunas” David Cortejoso.
Fuente: Peleas entre hermanos Blog Psicoglobalia
Foto: edington.aupairnews.com